Dengue y cambio climático

El dengue, este año, no se ha hecho sentir como en años anteriores, a pesar de ello existen casos aislados. Este hecho no significa que hay que bajar la guardia en la lucha contra el dengue, por el contrario, se debe trabajar para prevenir la enfermedad.

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En varias ocasiones hemos mencionado que el dengue, según algunos entendidos, se debe también al «cambio climático»; este viene a ser un fenómeno global, que se está dando en todos los países sobre todo porque tiene mucho que ver con la relación del hombre con la naturaleza.

En nuestro país por ejemplo, cada vez se extiende más la frontera agrícola; la deforestación sigue avanzado y se realizan grandes quemazones. La emergencia que se tuvo por incendios y sequía, en años anteriores, fue una realidad grave porque han sido muy extensos y mucho más agresivos.

A todo esto se suma las urbanizaciones que se realizan en forma muy precaria. La gente no propicia la salubridad: generalmente los patios y los jardines están descuidados, existen muchísimos criaderos y el Aedes aegypti es un insecto que tiene una gran capacidad para adaptarse a nuevos ambientes.

De esta manera el cambio climático –según los expertos- podría producir, además, un agravamiento en la situación de la malaria o el mal de chagas; en este último caso, la adaptación de la vinchuca a vivir en zonas de altura. Quiere decir que la acción del hombre al avanzar y quitarle espacio a todos los animales y a todo el ecosistema, estos encuentran nuevas formas de sobrevivir. Es un proceso de adaptación y selección natural.

Todo lo que nos está sucediendo es por causa de un mal procedimiento en el actuar, que muchas veces se da por falta de educación general básica y de manera más concreta de educación ambiental sanitaria.

¿Sabías que…

Los síntomas del dengue son: fiebre; dolores de cabeza y cuerpo; escalofríos; vómitos; hemorragias (encías, nariz, intestino, estomago)?

Para tener en cuenta

Las autoridades de la salud recomiendan: limpiar la cuadra, el barrio y las casas para evitar los casos de dengue y fiebre amarilla, teniendo en cuenta que ambas enfermedades se transmiten por la picadura del mosquito Aedes aegypti.

¿Qué podemos hacer?

a. Tener todos los floreros renovados de agua.

b. Usar correctamente los cestos de basuras.

c. Disponer carteles instructivos.

d. Arreglar los jardines.

e. Organizar talleres de concientización y prevención.

Actividades

a. Reflexiona acerca de la importancia de prevenir las enfermedades.

b. Realiza carteles de prevención de la enfermedad del dengue.

c. Busca informaciones que puedan ayudar a la mejor comprensión de la enfermedad del dengue.

Fuente

OMS. 2014. Cambio climático y salud (en línea). Consultado 09.05.2014.

Disponible en http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs266/es/

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