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SALTO DEL GUAIRÁ (Rosendo Duarte, corresponsal). Si bien la lluvia tardó en presentarse, llegó en abundancia. A estas alturas tanto el plantío como el replante de algunas parcelas afectadas por granizadas están totalmente hechas en el departamento de Canindeyú, donde la oleaginosa supera las 650.000 hectáreas.
El titular de la Asociación de Agrónomos de Canindeyú, ingeniero Enrique Gauto Fretes, señaló que una vez superada la etapa de siembra, los productores acompañan con grandes expectativas el desarrollo de las plantas, que hasta ahora está en excelente estado, a pesar de la excesiva cantidad de lluvias que cayeron en toda la zona, indicó.
Explicó que ante la falta de lluvia en los meses de agosto y setiembre últimos, el grueso de la siembra se realizó en el mes de octubre, casi con un mes de retraso del periodo normal y legal. “Pero el único inconveniente que se crea con eso es que el cultivo entre zafra (zafriña) se tendrá que iniciar más tarde”, señaló.
Gauto indicó que las previsiones meteorológicas son de las mejores, especialmente para noviembre y diciembre próximos, esperando que también los primeros meses de 2018 llueva lo suficiente. La zafra normal de la soja, la que está en pleno desarrollo, lleva un proceso de 120 a 140 días hasta la cosecha, lo que significa que la colecta se extenderá al mes de febrero.
La producción agrícola a gran escala en Canindeyú tiene dos zonas bien diferenciadas. La conocida como zona alta, que se extiende en toda la ribera del Paraná –desde Salto del Guairá hasta Puerto Marangatú– y sobre la frontera seca hasta el Km 35 de Curuguaty, tiene una capacidad productiva promedio de 4.000 por hectárea. Mientras que la zona baja, por su menor calidad de suelo, llega a 3.500 kilos por hectárea. En zafras muy buenas puede llegar a 4.000 kilos.
En cuanto a costo de insumos y maquinarias, un agricultor prudente invierte entre 500 y 600 dólares por hectárea. No se lleva en cuenta cuotas de bancos ni implementos. Al que es arrendatario, se debe agregar el costo de alquiler de la tierra.
El costo del arrendamiento en la zona baja cuesta al producto entre 600 y 1.000 kilos de soja (entre 180 y 300 dólares), por hectárea, mientras que en la zona alta llega a cotizarse 1.400 kilos por hectárea (420 dólares), según los datos que maneja la Asociación de Ingenieros Agrónomos.
Las variedades más cultivadas en la zona son la Nidera 5909 y Monsoi 6410.
Canindeyú es uno de los departamentos que más ha crecido en producción agrícola empresarial en los últimos años, llegando varias veces a superar el segundo puesto de la producción a nivel nacional, que compite con el departamento de Itapúa.