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SALTO DEL GUAIRÁ (Rosendo Duarte, corresponsal). El exgobernador de Canindeyú y exsenador colorado Luis Talavera Alegre dijo que la construcción de un puente internacional debe ser una de las luchas fuertes de los saltoguaireños con sus autoridades, a partir del próximo periodo presidencial. Indicó que el proyecto de obra está plenamente justificado por las inversiones que están siendo ejecutadas por el sector privado en la ciudad.
“Al tratarse de una estructura comercial fronteriza debe tener fácil accesibilidad desde el Brasil para tener resultado”, expresó.
El exgobernador del XIV departamento advirtió que sin un puente, Salto del Guairá corre el riesgo de atrofiarse como polo de desarrollo y terminar víctima del aislamiento, desde el lado fronterizo.
Talavera Alegre señaló que la obra puede ser financiada con capital privado, recuperable mediante el peaje. Respecto a las negociaciones políticas con el Brasil aseguró que no percibe la posibilidad de demasiadas trabas porque no serán ellos quienes financien.
Además, indicó que es una obra que también va a tener su importancia económica para el vecino país, que exporta gran volumen de productos al Paraguay.
Talavera recordó las negociaciones que él mismo realizó ante las autoridades brasileñas para el asfaltado del tramo Salto del Guairá-Katuete (60 km), a cargo de la Itaipú Binacional. Dijo que tanto el presidente de entonces Juan Carlos Wasmosy, como el director de Itaipú Luciano Giménez les había descartado la construcción de dicho tramo, pero con una entrevista con el director brasileño de Itaipú se destrabó dicho proyecto.
El intendente local, Eduardo Paniagua (ANR), señaló que el puente internacional entre Salto y Guaíra no solo está plenamente justificado, desde el punto de vista del desarrollo que está alcanzando la zona, sino que ya resulta muy necesario.
Recordó que la ciudad recibió hasta ahora más de 500 millones de dólares en inversiones privadas y existe casi otra similar cantidad de dinero en perspectivas. “Sin puente el desarrollo de nuestra ciudad puede limitarse obligatoriamente y eso sería lamentable”, acotó.
Salto depende en un 99% del Brasil, en términos económicos. Su comercio, principal motor, es visitado en promedio por 5.000 personas y en ocasiones llega hasta 40.000 visitantes. El ingreso de turistas no es mayor solo por las limitaciones viales.