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Pese a las precariedades y la burocracia del Gobierno que deben sortear para estudiar, los estudiantes y docentes no pierden la esperanza de contar con las mencionadas salas dotadas de equipos y materiales didácticos que los ayuden a mejorar el aprendizaje.
La escuela San Blas está ubicada en el Km 9 Monday, de Presidente Franco, y cuenta con 412 alumnos, en los turnos mañana y tarde, del jardín al noveno grado.
Los estudiantes se ven obligados a soportar diversas precariedades en cuatro salas de clase de madera, pese al proyecto “aulas de madera cero”, promovido por la Gobernación del Alto Paraná.
Tanto la Comuna franqueña como el ejecutivo departamental construyeron dos aulas de material, respectivamente; sin embargo, aún sobran cuatro salones que en días de lluvia deben ser clausurados, y al menos cuatro grupos de alumnos no desarrollan clases esos días.
De igual forma, los niños almuerzan al aire libre, por falta de un comedor.
La Comuna, a cargo de Alcides Fernández (ANR), anunció que construirá dos aulas más y un comedor, pero no la sala de informática y biblioteca.
Ceferino Romero, director de la institución, dijo que, además de la construcción de las salas de clase, también es necesario un centro informático, pues en la escuela no cuentan con computadoras, siquiera para los trabajos administrativos.
“Nosotros hacemos todo a mano, y los documentos que no podemos entregar así mandamos hacer a computadora en otros lugares. Necesitamos equipos informáticos, queremos montar una sala de informática, también una biblioteca”, explicó.
Romero señaló que la entidad Itaipú Binacional se comprometió a instalar un centro informático en la escuela, pero hasta ahora no cumplió la promesa.
Intentamos comunicarnos con representantes de la Itaipú para saber si ejecutarán el proyecto, pero sin éxito.