Cargando...
CIUDAD DEL ESTE (De nuestra redacción regional). La empresa adjudicada con la construcción de la obra de mejoramiento de los accesos a la capital departamental es Tecnoedil Constructora. Dentro del proyecto de construcción se prevén dos viaductos paralelos al existente en el kilómetro 4, además de trabajos complementarios en el kilómetro 5,5 y un paso a desnivel (túnel) bajo la ruta VII de modo a unir las dos avenidas colectoras, San Blas y Monseñor Rodríguez. El monto del contrato es de unos G. 39.880.859.167.
Actualmente en la rotonda se están efectuando los trabajos de desagüe pluvial, instalación de electroductos subterráneos y los ensanches laterales. A partir del cierre de la rotonda se tiene previsto iniciar los trabajos viales para la futura configuración y después el inicio de las fundaciones, previsto para junio próximo.
Los trabajos del viaducto del km 5,5 estarían entrando con mayor fuerza en junio con el refuerzo del desagüe pluvial que cruza debajo de la Ruta VII, para inmediatamente después iniciar con las fundaciones y el montaje del viaducto.
Terminadas las fundaciones se estaría procediendo al montaje de los pilares y vigas de los viaductos.
Al respecto el ingeniero Juan Pablo Cabral, de Tecnoedil, informó que el viaducto del km 5,5 sufrió cambios en el proyecto. Por recomendación del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) y se amplió el gálibo vertical de manera que puedan pasar los vehículos pesados.
Agregó que después se agregaron dos rampas interconectoras entre las colectoras laterales y la Ruta VII, de manera que el retorno y por sobre todo el acceso de los pobladores de los barrios La Blanca y Che la Reina a la Ruta VII sean cómodos.
Prefabricados
Para esta obra se apunta a construir con la mayor cantidad posible de piezas prefabricadas, sobre todo en los puntos donde interfieran con el tránsito. Estos es para evitar la mayor cantidad de molestias al tráfico y sobre todo por seguridad, señaló en encargado de obras.
Explicó que las estructuras de hormigón cargadas en el local implica semanas y meses de encofrados y endurecimiento, además de una mayor circulación de máquinas y personas. Esto alarga el tiempo de interferencias al tránsito que serían obligados a desviar la zona de obra, que en este caso es la rotonda del km 4.
“En uno de los puntos más conflictivos en lo que refiere al tránsito de vehículos y personas, representa un peligro tanto para la gente que trabaja como para los automovilistas”, dijo Cabral.