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Asimismo, comenta: “La causa de los dolores son los calzados inadecuados, hacen que uno pise mal, causan dolores, callosidades, asperezas, uñas encarnadas y verrugas plantares.
“La uña encarnada es una afección de los dedos del pie, se produce cuando una esquina aguda de la uña se clava en la piel, al final o en un costado del dedo.
Cuando la uña se introduce produce inflamación y mucho dolor, “luego empieza a crecer piel y hasta puede llegar a supurar pus. Si no se trata, esa uña se infectan los huesos y hasta podría necesitar un tratamiento quirúrgico”.
Paciente con diabetes
Al tratar los pies de un diabético es importante tener mucho cuidado al cortarle las uñas, así como al eliminar asperezas y callosidades. “Los callos se producen por la presión sobre una superficie, y hacen que la piel “muera”, se forma una superficie dura y protectora. La causa es la constante presión y roce del calzado”, según Mirian.
Verrugas plantares
Las verrugas plantares crecen en la superficie de las plantas de los pies. “Se pueden encontrar en cualquier parte de esta zona, pero son más comunes en donde hay presión y fricción del calzado. Uno de los principales focos de contagio son las duchas públicas”, expresa.
No se aconseja que la persona se saque ella misma las verrugas, ya que puede dañarse y los cortes en la piel son entradas para que se propaguen a otras zonas. Las grietas en los talones pueden evitarse con sales minerales, exfoliante y una buena crema hidratante.
La experta recomienda acudir al pedicuro capacitado cada 15 días y realizarse un masaje reconfortante.