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Lixy Durán Vázquez tiene 25 años y es una madre que pasó por esta situación tan difícil: la pérdida de su hija de dos añitos. Pero su fortaleza interior le ayuda a vivir y enfrentar esta realidad.
“El apoyo de la pareja es muy importante, así como el de familiares y amigos”. Ella aconseja que para sobrellevar esta situación se trate de mantener el tiempo ocupado, es decir, continuar con el trabajo, realizar alguna actividad extra, etc.
“Yo por ejemplo le llevo a mi hermanita a la escuela y le ayudo a mi mamá que está enferma”, comenta.
“Las ropas de mi nenita –que está en el cielo– siguen intactas en la casa y me ayudan a sentirla más cerca. Incluso me hace bien ir a lugares a los que iba ella, su guardería por ejemplo”.
Señala que “nuestra angelita nos unió más con mi esposo, como pareja, tratamos de no pelearnos, porque lo único que buscamos es tranquilidad y paz interior”.
“Nosotros tratamos de sobrellevar esta difícil situación y vamos a la casa de amigos y familiares, procuramos distraernos. Esta situación nunca te olvidas, pero hacés pasar”, dice.
Después de cuatro meses “nos enteramos de la noticia de que un varoncito está en camino. Este bebé es el motor que nos impulsa a luchar, a seguir, a continuar. Nosotros además seguimos avanzando por nuestra angelita que nos da la fuerza necesaria, nos da esperanzas para seguir y no entregarnos al dolor”, culmina.