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Los jóvenes son los principales consumidores de esta sustancia que no solo es peligrosa porque puede generar adicción, sino también porque el exceso favorece un alto nivel de riesgo.
Concretamente, y aunque los datos estadísticos no se refieren a las edades, se sabe que mientras en 1966 se consumían 9,5 litros de cerveza por habitante al año, en 2003 esa cifra ascendía a 36 litros.
Si estos datos se extrapolan a la población joven, se obtiene una realidad por lo menos llamativa, no desde un costado aleccionador, sino pensando en las consecuencias.
El alcohol en la adolescencia, época de maduración del cerebro, impacta a corto y largo plazo.
“Se sabe que el consumo excesivo de alcohol durante la adolescencia causa daños irreparables en el cerebro.
Estos se traducen en fallas en la memoria, déficit de atención y dificultad en la toma de decisiones. También es muy frecuente encontrarnos con la disminución o desaparición del control inhibitorio”, expuso el Dr. Ricardo Allegri, médico neurólogo, jefe de Neurología Cognitiva, Neuropsicología y Neuropsiquiatría de la Fundación Fleni.
La previa
La “previa” es el término con el que se conoce a las reuniones de jóvenes que se realizan en la casa de alguno antes de ir a una fiesta. Durante estos encuentros, que por lo general se llevan a cabo ambos días del fin de semana, los adolescentes muchas veces no toman por gusto, sino porque consideran que el alcohol es una herramienta modificadora de la conducta y del humor.
“Aunque se tome alcohol solo durante los fines de semana, la posibilidad de que se desarrollen daños irreversibles está presente, debido a que como ocurre con todas las otras partes del organismo, durante la adolescencia el cerebro de las personas se encuentra en etapa de maduración y no cuenta con las herramientas necesarias para defenderse de las ‘agresiones’ que sufre como consecuencia de los hábitos”, agregó el especialista.
Los cambios
En cuanto a los cambios que se producen a nivel cerebral, Allegri enumeró: menor tamaño del hipocampo, disminución de la corteza prefrontal y peor calidad de sustancia blanca.
“Estos cambios se manifiestan clínicamente en fallas de la memoria (10 por ciento menos de capacidad para recuperar la información), desatención, disminución del compromiso en la toma de decisiones y dificultades en el control inhibitorio y de impulsos”.
Fuente: PRO-SALUD News.
AGENDA
* El 20 y 21 de abril se realizará el IV Seminario de actualización pediátrica. Empezará a las 8:30 con “Congestión nasal”, a cargo de la Dra. Cecilia Borel, de Chile. Más informes al 608-171.
* Un taller de respiración holotrópica se realizará en Villa Florida, el 21 y 22 de abril, con la coordinación de José Franzini. Más datos al 0981 124 261.
* El Dr. Jame Tallis vendrá al Centro Cerena el viernes 27 y sábado 28 de abril para hablar sobre el síndrome de Asperger. Informes al 224-269.