Extracción de sangre

Los análisis de sangre arrojan luz sobre los diagnósticos médicos. Los instrumentos utilizados deben ser estériles y desechados después de la punción de manera segura para pacientes y trabajadores del laboratorio.

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La recolección de sangre de una vena o una arteria se debe realizar con mucho cuidado, pues la muestra servirá para realizar un análisis de laboratorio y determinar si existe alguna patología en esa persona.

La doctora Irma Lovera, bioquímica, indica que el 99% de las punciones para la toma de muestra sanguínea se realiza de las venas del brazo. El sitio de punción en el paciente varía dependiendo de la edad, así como de la accesibilidad de la vena, por lo general, del pliegue interno del codo o del dorso de la mano. Puede utilizarse cualquier vena accesible, para la extracción de sangre.

“El 1% restante de las punciones se realiza de capilares y arterias, por ejemplo, en pacientes internados en terapia. Esto se debe a la complejidad para la toma de muestra y también por el tipo de estudio solicitado. Un análisis de sangre forma parte de un conjunto de exámenes exploratorios para detectar trastornos de salud o enfermedades potenciales”, afirma.

Resalta que son muchos los factores que contribuyen a la variación de los valores reales en una prueba de laboratorio. La mayoría de las pruebas bioquímicas, hormonales e inmunológicas requieren un ayuno mínimo de ocho horas, un ayuno de 12 horas para los exámenes de lípidos (colesterol, triglicéridos, lipoproteínas, HDL-colesterol y LDL-colesterol).

Para todos estos procesos de laboratorio se tendrán en cuenta varios conceptos de seguridad: aquellos elementos utilizados para una extracción de sangre deben ser estériles y desechados posterior a la punción. En cuanto a los materiales utilizados, existen normas de bioseguridad para el área de laboratorio clínico, por la particularidad del manejo con todo tipo de líquidos, fluidos y secreciones de pacientes. Se considerarán potencialmente contaminados y se siguen estas directrices: el empleo de centrífugas provistas de carcazas para minimizar el riesgo de aerosoles, gotitas, salpicaduras o derrames. Además, el aspirar líquidos con la boca es una práctica prohibida y riesgosa, por lo que en la actualidad se utilizan pipetas o tubos para trasvasar líquidos automáticos”.

darzamendia@abc.com.py

 

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