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Cualquier festejo o protesta conlleva el uso de bombas pirotécnicas, y en las fiestas de fin de año hasta los niños piden encenderlas, sin dimensionar lo peligrosas que son para sus manos, ojos y oídos. El doctor Jesús Marín, cirujano plástico, propone que se instituya el 21 de diciembre como el Día internacional de las manos y hace algunas recomendaciones.
Recuerda el profesional: “Comencé en el 90 cuando hice la especialidad en nuestro Primeros Auxilios sobre Brasil, ese año tuvimos 16 casos de afectados en manos por pirotecnia. Y el año que más tuvimos fue en el 2000, porque lo que decían que iba a suceder, el fin del mundo, incentivó a tirar bombas en grandes cantidades”.
“En estos 25 años de experiencia puedo decir que los daños en manos dependen del tipo pirotécnico que se utilice: existe la pólvora blanca y pólvora negra. La blanca produce quemaduras de primer a tercer grados, y ahí trabajamos con el doctor Bruno Balmelli, director del Centro Nacional de Quemaduras y Cirugías Reconstructivas (Cenquer). Y las bombas de pólvora negra contienen azufre y clorato, que aumentan el poder de la explosión, que en gran cantidad producen amputaciones. Para tener una idea un gramo de pólvora equivale de 30 a 35 kilos de fuerza, eso sería en la práctica aquel que utiliza la bomba denominada 1 x 3. Otra bomba más fuerte es un 3 x 3 que tiene entre cinco a siete gramos de pólvora, y equivale aproximadamente de 250 a 255 kilos de fuerza, que produce lesiones en piel, músculo y tendones. El más potente 12 x 1 tiene aproximadamente entre 10 y 12 gramos de pólvora y equivale a 400 o 450 kilos de fuerza, como si le cayeran cuatro heladeras encima”, ejemplifica.
“Eso ya produce aparte de lo anterior, fractura y amputaciones en dedos, falanges y toda la mano en algunos casos. Pero hacemos la salvedad de que también producen lesiones, por sus ondas expansivas, en conducto auditivo, causan ceguera y pérdidas importantes en la cara”, describe.
¿Qué se puede hacer?
El galeno recomienda tener a mano estos teléfonos: 204-532 y 204-800 Hospital del Trauma. El Centro del quemado: 426-100.
El especialista dice que no tienen otra arma que explicarle a los padres que ningún artefacto pirotécnico esta exento de producir un tipo de lesiones, desde una quemadura hasta la amputación.
“Mejor no comprar, pero si los niños manipulan juegos pirotécnicos deben estar bajo la supervisión de un adulto. Si se produce un traumatismo envuelva con una toalla la mano, levántela con una pañoleta atada al cuello a la altura del corazón y diríjase a Emergencias Médicas. Si se produce una quemadura, no coloque ningún tipo de crema porque enmascara. Cubra con una toalla mojada con agua helada, a la altura del corazón y dirigirse al Hospital especializado”.