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“El running es una manera excelente de seguir conectado con el cuerpo y la mente. Se considera una opción de vida sana porque crea un estilo de vida saludable y de armonía para la mente y el cuerpo”, asegura el profesor Aníbal Correa, quien comenzó con el running a los 18 años. Cuenta con su grupo de corredores, el “team Correa” donde transmite toda su experiencia y enseñanzas a sus alumnos para que puedan alcanzar sus metas”.
Gabriela Ulke Mayans, parte del grupo de corredores del profesor Correa y magíster en nutrición, comenta que el lema es: #porque nada es imposible.
La corredora explica que “el grupo se inició en el 2016 y no existe un rango de edad para ingresar al equipo; sin embargo, de acuerdo a la edad de cada integrante se hace un entrenamiento específico. Actualmente somos 28 alumnos y los entrenamientos son en las Fuerzas Armadas, parque Ñu Guasu, Parque de la Salud, Costanera, Jardín Botánico, cerro Lambaré y diferentes circuitos. El grupo también cuenta con clases de ejercicio funcional a cargo del profesor Ignacio Miranda”.
La novedosa práctica de correr en grupo genera “la ayuda y la motivación mutua haciendo que el cuerpo se relaje, además de hacer amistades y compartir momentos sanos y felices”, describe.
A quien va a empezar a trotar, el profesor Correa recomienda “tener confianza en sí mismo, y no solo por perder peso. Hay que respetar el cuerpo seguido de un chequeo completo médico y mantener los horarios de entrenamiento. El calzado y la indumentaria deben ser adecuados”, aconseja.
Entre los riesgos el entrenador advierte que “pueden darse en el corazón, en la pérdida de masa muscular y sobre todo si no se tienen los cuidados correspondientes una lesión puede dejarte fuera de una competencia”.
La magíster Ulke Mayans señala que la nutrición del corredor contendrá: “hidratos de carbono, incluir en la dieta pan de grano entero (integrales), pastas, avena y arroz integral”.
Asimismo, “proteínas de origen animal: carne vacuna magra, pollo o pescado. También es recomendable el consumo de huevos, que tienen un alto valor biológico, lo que significa que aportan proteínas de alta calidad”, explica.
Destaca que las “proteínas de origen vegetal a través del consumo de legumbres; frutas, especialmente bananas, aguacate y frutas cítricas”.
No olvidemos las “verduras de hojas verdes que contienen antioxidantes que eliminan los radicales libres, limpian las arterias y aportan una gran cantidad de calcio. Tubérculos como papa y batata ricos en carbohidratos; frutos secos como nueces, almendras y maní para proteger el corazón.
Fotos: Gentileza.