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El chequeo médico básico para los niños es fundamental antes de comenzar el año lectivo, ya que de esta forma se podrán prevenir problemas en el aprendizaje o en las actividades físicas.
El doctor Jorge Gómez Yegros, pediatra, indica que según la Organización Mundial de la Salud la salubridad es todo bienestar físico, psíquico y social, lo que también se aplica a los niños. Es importante que un niño esté en óptimas condiciones de salud para acudir a clases y así obtener mejor provecho de las enseñanzas. Sin embargo, se sabe que solo esto no garantizará el nivel académico, pero sí a un niño enfermo le será imposible tener un buen año lectivo. Se aconseja realizar el control médico preferentemente antes de iniciar las clases.
“El profesional preguntará a los padres o al encargado como observan al niño, luego se procederá a realizar al pequeño los exámenes físicos completos. Se incluyen el control de los signos vitales, como pulso, presión arterial, medidas, peso y ver cómo se encuentra dentro de la tabla de crecimiento acorde a la edad”, añade.
La doctora María Eugenia Boselli, traumatóloga pediatra, afirma que la columna del niño sufre ante el sobrepeso de la mochila, así como la mala postura que adopta cuando está sentado o parado. Debe recordarse que las mochilas no deben sobrepasar el 10% del peso del niño; se aconseja optar por las que poseen rueditas para que sea más cómodo su traslado.
“Es fundamental la corrección postural, es decir, la buena posición cuando está sentado, por ejemplo, ubicarse al fondo de la silla con la columna contra el respaldo. Otro aspecto a considerar es que al escribir la altura del pupitre debe ser de un tamaño adaptado a la edad del niño, ya que de lo contrario pueden aparecer dolores por malas posturas”, alega.
El doctor Gómez menciona que también dentro del chequeo anual es necesario hacer un análisis básico de sangre para determinar el estado general, además el médico tomará la decisión si es importante realizar un análisis de orina o de heces fecales.
Agrega el profesional que hoy día para los niños que hacen mucho deporte ya está indicado realizar un electrocardiograma, con un cardiólogo pediatra que interprete el resultado, para verificar y asegurar que el rendimiento cardiovascular del pequeño se encuentre en óptimas condiciones.
Cómo están sus ojos y oídos
“Los niños en etapa inicial o primaria deben hacerse un chequeo anual de vista y una audiometría para la verificación de una óptima audición, ya que si un niño no escucha o no ve bien en clase, afectará su rendimiento académico. También es importante en la etapa escolar, entre los dos a cuatro años de edad, dar una guía anticipatoria a los padres de qué esperar de su hijo, desde el punto de vista físico y psíquico, puesto que año a año en esta primera etapa de la infancia aumentará la destreza física y psíquica del niño. Y un atraso o dificultad del mismo es importante para una evaluación profunda con el especialista, de acuerdo al área en que se encuentra el déficit”, enfatiza.
Lleve a sus hijos al pediatra como un acto responsable de amor y cuidado.
Fotos: Silvio Rojas