Carillas dentales

Existen opciones restauradoras con una técnica predecible para resolver muchos problemas estéticos dentales y funcionales que buscan mejorar la sonrisa. Las carillas por ejemplo son una alternativa, que requiere controles y cuidados para lucir bellos dientes por mucho tiempo.

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Nuevos tratamientos dentales pueden cambiar la estética del rostro y proporcionar mayor seguridad a la persona. La doctora Liliana Muñoz de Chávez, cirujana especialista en rehabilitación oral, explica que “las carillas de porcelana, también denominadas lentes de contacto dentales, son láminas delgadas que deben construirse en un laboratorio dental antes de unirse a los dientes. El procedimiento prepara los dientes raspando una capa delgada de esmalte externo (aproximadamente de 0,5 a 0,7 mm), para acomodar la carilla, y las láminas semitranslúcidas se unen a los dientes con un adhesivo”.

La doctora Muñoz de Chávez añade que “existen las carillas de resina adhesiva (nanopartículas) que se aplican directamente a los dientes y el dentista las forma adecuadamente. El resultado final es muy natural y efectivo. Las resinas de última generación pueden coincidir con el color de sus dientes para imitar detalles de transparencias y sombras”.

La doctora Mirta Alcaraz, odontóloga, magíster en endodoncia, afirma que “las carillas constituyen una indicación terapéutica cuando se quiere corregir el color de uno o más dientes permanentes en los que no se obtuvo el resultado deseado con el clareamiento. Así como al paciente adulto que quiera modificar la forma, el tamaño de los dientes o la alineación”.

La especialista señala que “el paciente debe saber que todo tratamiento odontológico debe tener una indicación, basada en criterios profesionales y no en un deseo”.

Por su parte, la doctora Muñoz de Chávez afirma que “las carillas están indicadas en dientes descoloridos por tratamientos de conducto u otros procedimientos (uso de antibióticos); en dientes astillados o rotos; dientes con formas irregulares; así también como alternativa al tratamiento de ortodoncia (en algunos casos). En dientes con espacios entre ellos (diastemas) y en cualquier otro problema dental que resulta en una pérdida de autoconfianza”.

Algo importante a saber es que las carillas dentales suelen durar de 7 a 15 años y luego serán reemplazadas, advierte la odontóloga Muñoz de Chávez.

“Siempre se realiza en boca sana, sin caries, sin sarro, sin inflamaciones de encía o sangrado”, apunta la doctora Alcaraz. Y agrega que “primero se toman registros con fotografías y radiografías. Se toman muestras (impresiones) para obtener modelos de estudio”.

En cuanto a las ventajas de la utilización de carillas de porcelana ante las carillas de resina la doctora Muñoz de Chavez dice que “las carillas de porcelana tienen mayor brillo; estabilidad del color; una gran sensación estética y mayor duración”. Mientras que “las carillas de resina son más económicas que las de porcelana; menos invasiva la técnica de preparación porque requiere menos desgaste del diente natural. También debo observar que las carillas de resina son menos estéticas que las de porcelana, deben reponerse y retocarse más frecuentemente que las carillas de porcelana”, finaliza.

mirtha@abc.com.py

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