Alcanzar los sueños

Uno de los momentos más especiales del año es su final. Haremos una revisión, un “check list” de lo cumplido y logrado, pero lo más desafiante es mirar el futuro con esperanza.

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Liliana González Delvalle, psicóloga laboral (*), nos dice que unas preguntas pueden ayudarnos a hacer la revisión y formular sueños para el Año Nuevo.

¿Qué objetivos incumplidos de este año querrías cumplir en el próximo? ¿Qué nuevos objetivos te planteas? ¿Podés reformular para el 2014 aquellos que no pudiste cumplir? ¿Cómo desearías verte? ¿Qué está en tus manos (rol de protagonista de mi vida) para que esa meta visión se cumpla? ¿Cómo me voy a comportar para mejorar ese resultado? ¿He perdonado?, ¿en qué extensión?, ¿de qué manera? y, sobre todo “¿me he perdonado?”.

Pensando en nuestros seres queridos, ¿qué deberíamos pedir a ellos que cambien?, ¿para qué?, ¿qué ocurrirá si esos cambios no se producen?

Pensando en mi comunidad o en el grupo en que estoy inserto, si estuviera en mis manos resolver un problema de la sociedad, ¿cuál podría ser mi aporte para que ese problema se solucione?

Diseñar la estrategia

“No importa el punto de partida; el terreno es el que es, adaptate: la situación actual es lo que es, y eso no lo podés cambiar, pero sí tu actitud, para mejorar esa circunstancia presente”.

Advierte que todo es posible. “Sea cual sea tu situación presente, llegarás donde te propongas si te mejoras a vos mismo, todos los días”.

Al referirse a las personas tóxicas, sugiere: “Olvidate de competir contra los demás, competí contigo mismo. Deja de lado las competencias tóxicas. Buscá cada día superar una nueva marca y una mejora real. Esto te hará avanzar inevitablemente y te transformará en una persona altamente eficaz, lo que incidirá en los resultados de tu vida personal y de tus emprendimientos”.

Salí de tu zona de confort, haciendo un poco más cada día: “que tus avances sean mucho más tangibles y rápidos”.

Como dice Marcelo Bulk en su libro “Autoliderazgo”, producir puede ser trabajar en la oficina o en la fábrica, cocinar, dar una caricia, acordarse del cumpleaños de alguien, obsequiar flores, contar dinero, etc. Te propongo escribir una lista con tus propósitos para el 2014. Pégalo en un lugar que lo vas a leer todos los días. Ponete las pilas, dejale a tu miedo. ¡Fuerza, y preparate para recibir con los brazos abiertos al 2014!

* MAE Consultora en gestión del talento y desarrollo organizacional.

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