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Por Sandra Villalba (17 años)
¿Por qué decidiste empezar a estudiar teatro?
Hace cinco años comencé con el teatro porque quería probar algo nuevo. Primero hice un taller que duraba pocos meses, pero luego se convirtió en una escuela de actuación en el Ateneo y más tarde seguí estudiando en el TIA, en el que hoy en día sigo.
¿Qué es lo que te motiva a actuar?
Me gusta porque es como un mundo diferente. Al entrar a un escenario se me olvida todo, mis problemas y todo el estrés; solo me relajo. Me encanta poder expresar lo que siento a través de alguien que no soy yo.
¿Cuál fue el papel que más te costó interpretar?
El papel de una cabaretera en la obra El casting, de Agustín Núñez, porque representó un reto para mí; tuve un mayor proceso para entrar en el personaje, por ser alguien totalmente diferente a mí.
¿Cuáles son las metas que tenés?
Me estoy preparando para algún día ser una gran actriz. Luego de terminar este curso, quiero estudiar en el extranjero y después hacer cine nacional. Sueño con ser reconocida por tener un buen nivel de actuación, no busco tener fama. Lo que quiero es llegar a sentirme realizada como actriz.
¿Qué es lo que podés aportar al Paraguay como actriz?
Busco mostrar que una actriz sí puede vivir de lo que ama, quiero que la gente se dé cuenta de que el teatro no es como se piensa: que los actores son excéntricos, que no se gana bien o que es un oficio que no tiene futuro. Mi desafío es demostrarles a las personas que sí se puede vivir solo de la actuación.
¿Por qué decidiste empezar a estudiar teatro?
Hace cinco años comencé con el teatro porque quería probar algo nuevo. Primero hice un taller que duraba pocos meses, pero luego se convirtió en una escuela de actuación en el Ateneo y más tarde seguí estudiando en el TIA, en el que hoy en día sigo.
¿Qué es lo que te motiva a actuar?
Me gusta porque es como un mundo diferente. Al entrar a un escenario se me olvida todo, mis problemas y todo el estrés; solo me relajo. Me encanta poder expresar lo que siento a través de alguien que no soy yo.
¿Cuál fue el papel que más te costó interpretar?
El papel de una cabaretera en la obra El casting, de Agustín Núñez, porque representó un reto para mí; tuve un mayor proceso para entrar en el personaje, por ser alguien totalmente diferente a mí.
¿Cuáles son las metas que tenés?
Me estoy preparando para algún día ser una gran actriz. Luego de terminar este curso, quiero estudiar en el extranjero y después hacer cine nacional. Sueño con ser reconocida por tener un buen nivel de actuación, no busco tener fama. Lo que quiero es llegar a sentirme realizada como actriz.
¿Qué es lo que podés aportar al Paraguay como actriz?
Busco mostrar que una actriz sí puede vivir de lo que ama, quiero que la gente se dé cuenta de que el teatro no es como se piensa: que los actores son excéntricos, que no se gana bien o que es un oficio que no tiene futuro. Mi desafío es demostrarles a las personas que sí se puede vivir solo de la actuación.