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“El Paraguay se ubica en el puesto seis de los países más deforestados del mundo; además, tenemos ríos, arroyos y lagos contaminados, excesos de monocultivos, y lo más negativo de todo es la inconsciencia de la gente”, explican. “Es necesario que la sociedad se preocupe por cuestiones ambientales. Esto nos motivó para ayudar en la organización de una marcha, mediante la cual pretendemos enfatizar la situación de deterioro en la que se encuentra el entorno natural”, añaden.
“En nuestro país son escasos los entes que se encargan de dar a conocer las consecuencias del cambio climático, sin embargo, en otras naciones es un tema prioritario, por eso es que toman el asunto con la seriedad debida”, menciona De Jesús. Los jóvenes insisten en que hay que valorar las riquezas naturales que poseemos en fauna, flora y acuíferos, y así, una vez que se evalúe el estado en que se hallan, la gente va a empezar a medir sus acciones y movilizarse por la causa.
Grisel comenta que el paraguayo sabe de la contaminación de arroyos por parte de empresas o personas, pero no se dispone a buscar soluciones y las municipalidades tampoco hacen algo al respecto. Los voluntarios dicen que la inconsciencia y falta de información hacen que exista un desinterés por parte de la sociedad. “Por eso tenemos como uno de los objetivos lograr que la ciudadanía reflexione y se preocupe; creemos que este punto es el inicio de todos los cambios que pueden darse después”, afirman.
De Jesús y Grisel instan a las personas a que suban fotos de los espacios verdes en sus hogares con el hashtag #Defiendemeel29 e informan que en Facebook pueden buscar el evento como Marcha Nacional Contra la Destrucción Ambiental. Ahí hallarán los datos con respecto a la actividad que se realizará en la costanera. “Todos debemos participar; queremos que sea algo histórico. El Paraguay tiene que alzar su voz contra los delitos y problemas ambientales”, finalizan.
Por Ricardo González (19 años)