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Zaira comenzó a ayudar en los trabajos de la peluquería desde chica, ya que sus padres tienen un salón de belleza, y creció observándo cómo hacían peinados y maquillaban. Poco a poco se fue adentrando en las labores cotidianas y descubrió que era algo que le apasionaba. “Me encanta estar en ese ambiente, quiero hacerme conocida en el país. No me basta con que sea algo que me dé de comer, yo siempre busco más”, comenta.
Este año se le dio la oportunidad de trabajar en el Asunción Fashion Week en el staff de Rommy. Manifiesta que fue una experiencia fascinante. “Tenía que hacer las cosas en cuestión de segundos, no me daba mucho el tiempo; son peinados muy elaborados”, comenta. Ella tuvo a su cargo la tarea de hacer brushing, planchita y ondas al agua a las modelos que desfilarían.
Cuenta que luego de cursar sus estudios de maquillaje y peinados, inmediatamente los aplicó donde trabaja, en la peluquería de su papá, Isidro coiffure. También ensaya sus diseños con sus amigas del cole: “Es mi hobby arreglar a mis compañeras, les digo que sin problema pasen a la pelu para atenderlas y también las ayudo cuando hay presentaciones artísticas”.
Aún no tiene decidido qué quiere estudiar, pero le gusta odontología, administración, ingeniería comercial y periodismo, ya que cree que tiene buen desenvolvimiento frente a la cámara. “Participé en un programa de Red Guaraní llamado Estética y moda Tv; fui de invitada para maquillar y peinar con mi papá, y me sentí bastante cómoda”, afirma.
Expresa que los jóvenes deben fijarse una meta y seguirla hasta alcanzarla, porque al encontrar lo que a uno le apasiona, lo puede lograr. “No sean como los demás ni se queden estancados, siempre tienen que querer más. Hay que intentar y luchar para llegar a los objetivos”, concluye.
Por Ayelén Díaz (17 años)