Cargando...
¿Cómo fue que decidiste crear un grupo de voluntarios?
Fui becada durante un mes por la Embajada de los Estados Unidos mediante un programa denominado “Jóvenes embajadores”. Allí tuve capacitaciones acerca de liderazgo y, al volver al Paraguay, junté a algunas amigas y creamos el grupo Efecto positivo.
¿Cuáles fueron las actividades que convirtieron a Efecto positivo en la mejor oenegé del 2013, según la Embajada de los Estados Unidos?
La oenegé lleva a cabo varios proyectos. Uno de ellos trata de concienciar a los alumnos de escuelas y colegios sobre la importancia del reciclaje, y a la institución más limpia la premiamos con una cantina montada. Para la segunda actividad, hablamos con las amas de casa del barrio Posta Yvykuá, en Capiatá, para que reutilicen materiales. A la mujer que tenía mayor cantidad de botellas y papeles le regalábamos licuadoras u otros electrodomésticos.
¿Qué proyectos lleva a cabo el grupo este año?
El grupo realiza actividades como la limpieza de plazas y la costanera de Asunción. También tiene la intención de volver a trabajar con instituciones educativas, recolectando pilas y plantando árboles, sin dejar de lado las visitas que se realizan a los niños del Hospital del Cáncer.
¿Cómo te sentís al producir un cambio en la sociedad?
Para mí, esto es un sueño; es increíble que movilizando pequeños recursos se puedan realizar grandes cosas y dar respuestas creativas a los problemas sociales. Ahora, soy asesora de Efecto positivo. Voy a seguir ayudando a mi comunidad; tendré que trabajar más cada día, sobre todo para conseguir fondos que ayuden económicamente a mi organización.
Por Javier Morales (18 años)