Trazos de cambio

Desde muy joven, el teatro ocupó gran parte de su vida, pero además de pasar horas sobre las tablas, Lucía Galiano Yegros (54) también ocupó su tiempo descubriendo lugares. Fue durante uno de los viajes que tomó para vacacionar en los Estados Unidos cuando decidió no regresar. 

/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2074

Cargando...

Cargada con apenas una maleta ligera, Lucy –como todos la conocen– llamó al Paraguay para encargar el envío de sus pertenencias, lista para iniciar un nuevo capítulo en su vida. Miami fue su lugar de residencia los primeros dos años, hasta que se trasladó a California, donde vive hace más de 12 años.

Así como en el Paraguay, el teatro siempre fue parte de su rutina en el país del norte, pero la distancia y el tiempo que implicaban estar en el escenario en un país extraño la empujaron hacia otra opción: la pintura. 

Hace poco más de un año, Lucy empezó a dar sus primeros pasos, pero hoy se posiciona entre una de las artistas notables residentes en el extranjero. Sus cuadros se destacan no solo por el matiz de cada pieza, sino también por la estructura y combinaciones de sus elementos.

Durante su breve visita al Paraguay realizó la exposición de sus obras en una muestra denominada Alucynaciones y, además, nos contó parte de su vida como aficionada a los deportes al aire libre y sus futuros proyectos.

¿Hace cuántos años dejaste el Paraguay?

Siempre disfruté viajar y estar al lado del mar. La aventura se inició como unas vacaciones hace 16 años. Me había ido únicamente con ropa ligera para pasar unos días, pero cuando decidí no volver, tuve que pedir que me envíen mis cosas (risas). Durante los dos primeros años viví en Miami y, posteriormente, me trasladé a California, donde estoy actualmente.

¿Volvés frecuentemente?

No, solo regreso una vez al año para visitar a mi familia, que se encuentra en su totalidad en el Paraguay. Me quedo alrededor de dos semanas.

Tu afición por la pintura es muy reciente...

Sí. Hace unos dos años conocí a una artista que me gustó lo que hacía, por lo que rápidamente empecé a tomar clases de pintura. Tras participar en varias exposiciones, el interés fue creciendo. Me apasioné tanto por pintar que me involucré de lleno en poco tiempo, pero mi primera pasión siempre fue el teatro. Me inicié en la escuela Arlequín y participé en más de 20 obras durante 15 años; incluso, trabajé en televisión al lado de Perlita Fernández.

¿Seguís involucrada con el teatro?

Tomé clases de teatro en California y audicioné para cuatro obras en las que participé. El mayor problema para poder seguir con el teatro siempre fue la distancia, que se complica aún más si se cuenta con otras actividades. Con Piere, mi pareja, intentamos pasar juntos los fines de semana, y si me toca estar en el escenario, es imposible. Tuve que poner en la balanza mis prioridades.

En cuanto a la pintura, ¿cómo describís tu trabajo?

Estoy muy influenciada por artistas paraguayos, como Ricardo Migliorisi, por ejemplo. Cuando hablo de influencia, me refiero a la valoración que les doy a sus obras y no a una copia. Siempre aprecié los colores y me gusta vestir de colorinche, por lo que pinto en varias tonalidades. Mis cuadros tienen collage que yo misma preparo. Se trata de un papel de colores que reutilizo bajo otras tonalidades, por lo que mis obras tienen mucha textura; utilizo siempre varias capas de pintura. Esos detalles se pueden apreciar mejor observando directamente los cuadros. Utilizo una técnica mixta, a la que en los Estados Unidos también suelen describir como orgánica.

¿Te inspira un elemento o tema en particular?

No, pinto de todo. No obstante, no trazo nada clásico, más bien intento crear pinturas que llamen la atención por la combinación de sus colores y elementos.

¿Alucynaciones es tu primera exposición?

En el Paraguay, sí. Sin embargo, he participado en otras exposiciones con la colectividad paraguaya en los Estados Unidos. Tuve muchas opiniones buenas y no solo me gané el aprecio de los compatriotas, sino también el reconocimiento del consulado. Es así que el cónsul paraguayo de la costa oeste, Robert Benítez, ya ha adquirido varios de mis cuadros, tanto para su colección privada como para la decoración del propio consulado. Generalmente, la venta de mis cuadros la realizo de boca en boca, prácticamente sin ofrecerlos.

Durante esta exposición en Asunción, ¿cuál fue la crítica a tus obras?

Muy satisfactoria, durante las dos semanas que estuvieron en la vidriera. Para esta exposición, traje 30 cuadros que permanecerán en la galería Expresiones mucho después de haber terminado la muestra. Aunque es mi primera exposición en el Paraguay, no es la primera vez que mis obras vienen a Asunción, pues ya había enviado pedidos específicos y una amiga se encargó de traer con ella varios cuadros, que los vendió rápidamente.

¿Ya tenés en planes una nueva muestra en Asunción?

Sí, creo que a partir de esta experiencia voy a volver todos los años con el fin de exponer mis obras. Me gustó mucho lo que sentí durante esta exposición; además, siempre es un placer volver al Paraguay.

¿Cómo ves el crecimiento del Paraguay en cada visita que hacés al país?

Cada año me sorprenden gratamente las nuevas empresas y emprendimientos que tienen los jóvenes paraguayos. Veo nuevos restaurantes, diseñadores, artistas y creadores, además de una juventud activa y dedicada a crecer.

Además de la pintura, les dedicás mucho tiempo a las actividades deportivas...

Sí, hago de todo (risas). Mi amor hacia California radica justamente en la posibilidad que me brinda de estar constantemente practicando deportes. Tiene montañas, mar y un clima perfecto, por lo que dedico tiempo a numerosas actividades deportivas al aire libre. Mi primer amor es la bicicleta de ruta; pedaleo como mínimo unos 100 km por semana y doblo ese número los fines de semana o en días de entrenamiento. La bicicleta fue lo que me unió a Piere, mi pareja de vida y entrenamiento (risas).

¿Esa afición nació en los Estados Unidos?

No. Aquí en Asunción ya disfrutaba de andar en bicicleta, pero la poca infraestructura con la que cuenta la ciudad nunca me permitió practicar el deporte de la forma en la que hoy en día lo hago allá. Hace 18 años pedaleaba con mucho miedo por las calles de Asunción; era una pelea constante con los automovilistas. Lastimosamente, esa situación, por lo que veo, sigue hasta hoy.

Alegre y de contagiosa sonrisa, su personalidad sencilla no solo transmite entusiasmo y color, sino también un placentero tiempo de conversación.

Lucy Galiano

Dedicada al teatro durante 20 años, dejó el Paraguay para instalarse en los Estados Unidos, donde afloró su interés por la pintura. Alucynaciones se denominó su primera muestra en Asunción.

Técnicas mixtas

El acuarelado, acrílico u óleo han sido durante mucho tiempo las técnicas más utilizadas por los artistas a la hora de pintar. No obstante, durante los últimos años, la técnica mixta ha ganado espacio en el mismo pedestal. 

El proceso es llamado así porque se emplean diversas técnicas en un mismo soporte o bastidor. El collage, por ejemplo –sumamente utilizado en las obras de Lucy–, es una técnica artística que pasa a ser denominada mixta cuando intervienen otras técnicas, como el óleo o tinta.

nadia.cano@abc.com.py

Fotos: Silvio Rojas, gentileza

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...