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La actriz estadounidense, quien se casará con el príncipe el 19 de mayo, es muy celosa de su imagen y no duda en dejar de lado a los amigos a medida que progresa en la vida, según las personas entrevistadas para el libro. Meghan: una princesa de Hollywood, que salió a la venta el jueves en el Reino Unido, detalla cómo la actriz de 36 años, una de las protagonistas de la serie sobre abogados Suits, dejó a su primer marido, quien le había ayudado en sus inicios. La biografía es de Andrew Morton, el escritor especialista en la monarquía británica y autor del best seller Diana: su verdadera historia, que contó con la ayuda en secreto de la difunta princesa de Gales.
Morton explica la fascinación que Meghan sentía por Diana, la madre de Enrique, en la época de su muerte, en 1997; de cómo lloró viendo los funerales y siguió con interés los detalles del hundimiento de su matrimonio con el príncipe Carlos. Los amigos de la familia dicen que se sentía atraída por Diana, “no solo por su estilo, sino también por su compromiso independiente con las causas humanitarias, viéndola como un modelo”.
Su amiga de la infancia Ninaki Priddy explica en el libro: “Siempre se sintió fascinada por la familia real. Quiere ser la princesa Diana 2.0”. Morton dice que las comparaciones con Diana son inevitables, dado el glamour de ambas y su apego a la beneficencia. Al mismo tiempo, señala las diferencias entre la tímida Diana, quien se casó con Carlos a los 20 años, y la profesional de Hollywood, de 36 años. “De algún modo, la mujer acicalada y lista para la cámara que es Markle es la mujer que Diana siempre aspiró a ser”, concluyó el autor.
El libro explica que, cuando finalmente logró el éxito como actriz, Markle se alejó de sus amigos, incluyendo a su marido y productor Trevor Engelson, quien la había ayudado en sus inicios. “Sus amigos en Los Ángeles constataron el cambio”, escribe Morton. “Ya no tenía tiempo para amigos a los que había conocido durante años. Parecía estar recalibrando cuidadosamente su vida, forjando nuevas amistades con aquellos que podrían pulir e impulsar su carrera”. La relación de Markle con Engelson empezó en el 2004 y se casaron en Jamaica, en el 2011. Poco después de su compromiso, Markle logró el papel protagonista de Rachel Zane en la serie Suits. Filmada en Toronto, la relación pasó a ser de larga distancia y el matrimonio se hundió en el 2013. Trevor empezó a sentirse, poco a poco, “como algo pegado en la suela del zapato” de su mujer, según explica un amigo en el libro. Otro amigo narró que la decisión de poner fin al matrimonio fue de Markle y otro que esta le devolvió el anillo de boda a su marido por correo.