Según el estudio, las féminas consideran el celular como un accesorio de moda y símbolo de estatus. Una parte de las encuestadas renuevan su móvil una vez al año y priorizan su diseño y tamaño reducido en su elección.
Además, consideran que el móvil dice algo o mucho de quien lo lleva, lo utilizan como un arma de seducción y, para muchas, influye en la percepción que tienen de una persona del sexo opuesto. A pesar de la fama, ellas no son las que más hablan por el móvil. Lo usan menos que los hombres, pero sí envían más mensajes de texto (SMS) que ellos. Otro dato curioso es que el celular es un buen medio para las mujeres para descubrir infidelidades. Una de cada tres mujeres reconoce que espía los mensajes de su pareja. Una práctica que ha servido al 20 % de las mujeres encuestadas para descubrir alguna infidelidad de su pareja.