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Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), “la hipertensión afecta a entre el 20 % y 40 % de los adultos en Latinoamérica y el Caribe, lo que representa alrededor de unas 250 millones de personas. La presión arterial elevada es el principal factor de riesgo para desarrollar enfermedades cardiovasculares, como las isquémicas del corazón y cerebrovasculares. Cada año, alrededor de 1,6 millones de personas mueren por estas enfermedades en Latinoamérica y el Caribe; de estos, medio millón antes de cumplir los 70 años”.
La hipertensión está considerada como una enemiga silenciosa que, de no ser controlada, puede desencadenar graves problemas. El paciente que la padece debe modificar su estilo de vida y optar por un tratamiento de fármacos indicado por el profesional encargado. Como complemento a la medicación existen alternativas nutricionales que hacen frente a la presión arterial elevada y mejoran la salud en muchos aspectos. La OMS asegura que las frutas son componentes vitales de una dieta saludable, y un consumo diario podría contribuir a la prevención de enfermedades cardiovasculares y algunos cánceres.
- Vida sana. “Saber aprovechar las frutas, verduras y hortalizas en su momento óptimo de madurez contribuye a que nuestro cuerpo siga el ritmo de la naturaleza, y el paladar se deleite con mil y un sabores”, expresa la periodista especializada en salud Carlota Máñez, autora del libro Bebidas para las 4 estaciones. A continuación, presentamos una lista de frutas que pueden ingerirse en forma de jugos para mantener en buenas condiciones la regulación de la presión arterial.
- Limón. Elimina la rigidez de los vasos sanguíneos, haciéndolos más suaves y flexibles, lo cual reduce la presión arterial. Adicionalmente, goza de vitamina B, necesaria para evitar las insuficiencias cardíacas.
- Melón. Contiene potasio, agua y otros nutrientes. Favorece el flujo sanguíneo y elimina toxinas. Dos tazas abarcan más de 1000 mg de potasio, cerca de ¼ de la cantidad diaria recomendada, comenta la doctora Lona Sandon, profesora asistente en la Universidad de Texas.
- Kiwi. Su pulpa verde es rica en luteína, un potente antioxidante que ayuda a proteger el organismo. También posee vitamina C y fibras, y es rico en magnesio y potasio.
- Banana. Es clave para la regulación de la presión arterial, ya que favorece la eliminación del sodio que se consume y equilibra el líquido del organismo.
- Manzana. Sus flavonoides (quercetina) actúan contra la hipertensión. De acuerdo con un estudio de la Universidad de Utah, la quercetina interviene en una enzima relacionada con la regulación de la presión arterial, lo que ayuda a mejorar la circulación de la sangre y evita el estrechamiento de los vasos.
- Sandía. Mantiene la presión en los niveles normales. Una investigación de la Universidad Estatal de Florida asegura que el cucurbocitrin contenido en esta fruta contribuye a la dilatación de los capilares sanguíneos y mejora la función renal, ayudando así a disminuir la presión arterial.
Gestación
Las mujeres embarazadas que tienen presión arterial alta pueden presentar un mayor riesgo de desarrollar enfermedad cardíaca, renal crónica y diabetes, según los resultados de un estudio publicado en la revista científica de cardiología Circulation, publicación de la Asociación Americana del Corazón (la más prestigiosa en la especialidad). En tal estudio se analizaron las formas menos graves de hipertensión arterial, que son mucho más comunes en mujeres embarazadas. Durante 40 años, los investigadores siguieron a más de 10.000 mujeres finlandesas que tuvieron un bebé en 1966, y calcularon el riesgo de desarrollar enfermedad cardíaca, renal o diabetes en la edad adulta entre las mujeres con presión arterial alta durante el embarazo, comparándolas con las gestantes con presión arterial normal.
dbattilana@abc.com.py