Expandir innovación

Enfocada en el área bancaria durante sus primeros años como profesional, cayó en la cuenta de que aquello que abrazaba como pasatiempo albergaba su verdadera vocación: crear moda. Eso motivó que, tras culminar un postrado en Ingeniería de Negocios, cursado en la Universidad Católica de Asunción (UCA), Valeria Resck Amaral (37) tomara la determinación de encarar una especialización en Fashion Design en el Istituto Marangoni de Milán (Italia), reconocido como uno de los centros de moda y diseño más importantes del mundo.

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Durante su estadía en Europa se orientó principalmente hacia el diseño de colecciones, procesos de producción y costeo en fábrica. De nuevo en el Paraguay, aplicó todo ese conocimiento en su atelier, en el que dispone de varias líneas, tanto para Ambar –marca de su propiedad– como las que delinea y confecciona para otras firmas.

Cien por ciento nacionales, sus diseños resaltan no solo por la originalidad de sus planteamientos y calidad de las prendas, sino también porque están a la altura de productos internacionales.

Con siete años de presencia en el mercado local, para la profesional, llegó la hora de analizar y planificar la conquista del interior del país, además de la expansión internacional de Ambar.

¿Qué encendió tu entusiasmo con el diseño?

Siempre me gustó todo lo relacionado a la moda, pero creaba a nivel personal. Al abrir mi propia empresa elevé el hobby al plano industrial y profesional.

¿Cómo nació la idea del establecimiento propio?

La marca Ambar se lanzó al mercado con una colección primavera-verano. Comencé comercializándola bajo el esquema de tiendas multimarcas, lo que inicialmente aportó visibilidad y posicionamiento al producto. Posteriormente, la demanda aumentaba, trayendo aparejada la necesidad de continuar evolucionando el modelo de negocio. Es así como, actualmente, tanto Ambar como el atelier Vatex SRL operan fusionados en un mismo local, en el cual también insertamos un showroom. De este modo, lo que surgió como un pasatiempo fue creciendo. Actualmente, las redes sociales también constituyen un canal de ventas muy fuerte. En atención a esta realidad, mantenemos activa presencia en ellas, tomando pedidos a través de Facebook e Instagram y de la página web www.ambar.com.py.

¿Hace cuántos años?

La marca lleva siete años en el mercado local. En un principio, la producción de las prendas era tercerizada; luego, en 2011, asumí la inversión para un taller propio, en el que en la actualidad se confecciona la totalidad de la indumentaria de Ambar, además de que trabajamos para otras firmas nacionales del segmento y también fabricamos uniformes empresariales. Me dedico por completo al área comercial y financiera de la empresa, pero también al diseño de las colecciones y al control de todos los eslabones de la cadena de producción.

¿La moda siempre fue tu primera opción?

Empecé mi vida laboral en el sector financiero, desempeñándome en varias entidades bancarias internacionales. Al finalizar mis estudios universitarios sentí el anhelo del negocio propio, y fue entonces cuando incursioné en el rubro de la confección y moda.

¿Cómo te manejás en un mercado que crece y cambia día tras día?

La industria de la confección es realmente muy competitiva, tanto a nivel nacional como internacional, por lo que ingresar y mantenerse en la misma requieren de mucha dedicación e innovación permanente. Además, en términos de costos, es sumamente difícil competir con mercados como el de China y Turquía, cuya confección es extremadamente barata. Considero fundamental diferenciarse de alguna manera en el sector, por lo que desde Ambar ofrecemos un servicio personalizado. Asesoramos a nuestras clientas en cada compra, conforme con el estilo físico y la personalidad individual, brindando a todas ellas la posibilidad de realizar ajustes e incorporar pequeñas modificaciones en las prendas, de modo a satisfacer por completo sus necesidades. Consecuentes con esta motivación, también confeccionamos sobre pedido, a la medida de cada mujer.

¿Cuál es tu inspiración a la hora de bocetar?

Viajo frecuentemente a Estados Unidos y Brasil –São Paulo–. Acostumbro asistir cada año a varias ferias internacionales de moda, como las de París, Londres o Madrid, buscando poner a disposición de las clientas lo último de la moda internacional, cuyas macrotendencias adapto finalmente a nuestro clima y al perfil particular de la mujer Ambar. Fundamentalmente, me pregunto cuáles son los gustos y necesidades de cada clienta y, a partir de eso, busco crear piezas originales y funcionales.

¿Cómo definís tu trabajo?

Estar al frente de una empresa es un trabajo sumamente desafiante, que requiere tomar decisiones importantes a diario, así como administrar todo tipo de imprevistos, con el objetivo de cumplir en fecha y forma con los pedidos y plazos para el lanzamiento de cada colección. Al mismo tiempo, es profundamente gratificante poder dar fuente de trabajo a tantas mujeres, que en muchos casos son las únicas encargadas de mantener a sus familias. Ver la transformación de un diseño, que pasa de ser unos metros de tela a adoptar la forma de una hermosa prenda de vestir valorada por tantas mujeres, es apasionante.

¿Hacia qué área del diseño te inclinás?

Ambar es casual femenina, pensada en la mujer contemporánea, multifacética y activa, que busca vestir bien, estar a la moda y, a la vez, cómoda. Nuestras colecciones están diseñadas de modo a proponer prendas que se adecuen a todas las actividades que realizamos las mujeres diariamente, desde ir al trabajo hasta salir a cenar o asistir a un evento corporativo.

¿Cuáles son los proyectos para arrancar el año?

Seguir expandiendo el negocio en el mercado local como marca y empresa de confección, apuntando siempre a la expansión nacional, ampliarnos hacia las principales ciudades del interior del país, como Encarnación y Ciudad del Este. Existen también planes de expansión regional e internacional y estamos en proceso de negociación con marcas muy reconocidas.

De personalidad jovial y alegre, imprime encanto en cada una de sus propuestas, las que obtienen protagonismo por su optimista colorido y el ímpetu que desprenden.

Valeria Resck Amaral

Licenciada en Administración de Empresas, posgraduada de la Universidad Católica de Asunción en Ingeniería de Negocios y especialista en Fashion Design por el Istituto Marangoni (Italia), es dueña de Ambar, marca local que apunta incluso al exterior.

Istituto Marangoni

Ubicado en el corazón de la ciudad de Milán (Italia), a pasos de Via Montenapoleone, considerada la calle de la moda por excelencia, el Istituto Marangoni, the school of fashion, art & design, ha formado a los grandes diseñadores del prêt-à-porter italiano.

En la institución, los estudiantes encuentran las herramientas para interpretar los estilos que encabezan las tendencias y evolucionar a través de programas actualizados constantemente, impartidos por catedráticos profesionales altamente especializados y capacitados en el sistema de la moda, su creación, gestión y comercialización.

Fuente: www.istitutomarangoni.com

nadia.cano@abc.com.py

Fotos David Quiroga y gentileza

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