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Pintar al príncipe de negro o echarlo del caballo antes de que llegue junto a vos no va a servir de mucho. Una situación difícil de encarar. ¿Te animás a probar de vuelta?Hola, ¿cómo estás? Bien. Qué hacés? Julieta está escribiendo
(desconectada). A la hora de iniciar una relación, una persona debería saber lo que quiere y adónde quiere llegar, además de asumir una postura receptiva y abierta hacia las personas que va conociendo. Las cosas tienen que darse naturalmente, sin forzarlas. De esta manera, se pueden construir relaciones más sanas y duraderas así lo indica la Lic. Ana Ozuna, quien también habla sobre algunos detalles que brillan a la hora de encontrar la solución al problema.
Timidez y viveza, ¿como agua y aceite?
A pesar de las diferencias físicas, psíquicas y sociales entre el hombre y la mujer, en realidad, en el fondo son bastante parecidos. Esto indica que actúan, se comportan, resuelven problemas o asumen posiciones ante determinadas situaciones de manera parecida, sin olvidar que, al mismo tiempo, cada individuo es un universo en sí mismo (de ahí la alta complejidad en las relaciones humanas). Los problemas siempre serán los mismos para uno y otro género, sin tener en cuenta quién es el tímido o quién tiene la viveza; y más aún en nuestros tiempos en los que el papel de la mujer se ha equiparado al del hombre y lo ha sobrepasado en más de un aspecto. El mayor problema en este tipo de pareja es el tiempo, el ritmo que cada uno de sus integrantes le da a su relación de pareja y la forma en que cada uno reacciona ante determinadas situaciones.
Encontrar pareja sin lupa pero con paciencia
Los famosos "príncipes azules hechos a medida" no se venden en el supermercado o en alguna tienda especializada; en ocasiones, las expectativas son muy altas, es decir, se ponen demasiadas barreras a la hora de buscar pareja, impidiendo que alguien se acerque. No se habla de salir a buscar una relación con el primer chico que aparezca, pero sí darse el tiempo para conocer a cada persona, saber de sus virtudes y sus defectos y ver si estos son compatibles con los nuestros. Siempre se debería buscar, limar asperezas para encajar mejor y ver si ello es posible. Esto es lo más difícil a la hora de buscar o conseguir pareja, lograr esa conjunción de deseo y caracteres, en tiempo y forma, ya que no solo uno decide, todo es y debería ser de a dos.
Defectos entre comillas; virtudes, ¿dónde están?
Si nos enfocamos tanto en uno o más defectos de la persona, también eso borra el todo positivo, es decir, lo bueno que posee o lo que aún nos queda por descubrir de ella y, por lo general, lo descartamos o marcamos en el acto dejándolo de lado. Haciendo una analogía, nos comportamos como caballos de carreras que, a la hora de correr, solo ven la meta y lo hacen, pensando solo en ella, sin ver o importarle lo que pasa alrededor.
Las redes sociales ¿son cómplices o enemigas para una futura relación?
Lo que hoy día definimos como redes sociales son exactamente eso: redes sociales, nada más. No es necesario ni alabarlas ni satanizarlas. El uso que cada persona le da es el centro de la cuestión en sí. En el estilo de vida vertiginoso que impone nuestra sociedad, se crearon las redes sociales, que no son más que una nueva herramienta a la hora de comunicarnos y están marcando una tendencia, debido al avance que representan, como en su momento lo hicieron el telégrafo o el teléfono. De seguro, ambos también pasaron a ser cómplices y enemigos en las relaciones de pareja. También debemos recordar que, como las redes sociales son una nueva herramienta de comunicación, aún nos queda mucho por aprender sobre ellas y las implicancias que pueden traer a nuestras vidas, así como aprender a discriminar sobre los beneficios o perjuicios que pueden producir.
La diferencia salarial, de estilos y de gustos ¿puede terminar con una relación?
En realidad no; por lo general, en nuestra sociedad, el hombre es el proveedor, aunque hay más mujeres cabezas de familia. Ahora, si esto difiere en la ecuación de pareja, a veces la situación se torna más complicada, pero debido a clichés impuestos por la sociedad. Y a los gustos y estilos de vida, uno se adapta, se puede aprender, como permanecer con gustos y estilos distintos, sin que ello signifique el fracaso de la pareja. Aun así, existen muchas parejas que utilizan estos puntos como agentes motivadores de rupturas.
Amor de tres: un mal negocio
A todos pueden gustarnos otras personas, admirar su belleza o intelecto, sin que ello signifique que hayamos dejado de amar a nuestra pareja, pero cuando esto supera la barrera de la simple admiración y modifica nuestra conducta con la pareja, más que una prueba, se convierte en indicador de que algo no está funcionando bien en nuestra relación.
¿Qué es mejor, chica con carácter o comprensiva en todo momento?
"Para los gustos, los colores" y "mucho de algo es perjudicial", frase que dice mucho. Al decir esto me refiero, a que de seguro habrá hombres que prefieran mujeres con carácter, como hombres que prefieran mujeres comprensivas o ambas a la vez, dependiendo de la situación. Las mujeres deberían lograr ser ambivalentes y responder de la manera en que la situación lo amerite.
El compromiso ¿ahuyenta al amor?
Cuando existe amor, el compromiso es una consecuencia del mismo; se torna en la base fundamental de una relación estable, ayudando a solidificarla a través del tiempo. Claro que a veces confundimos lo que esto simboliza y lo asociamos con la falta o pérdida de libertad. Sin darnos cuenta de que desde el momento que asumimos estar en pareja, nuestras libertades y responsabilidades se modifican.
Ingeniero, doctor u holgazán, ¿hay alguna diferencia cuando de amar se trata?
A la hora de amar, los sentimientos no conocen de barreras, gastos o costos de vida; entonces, sí es posible amar a un doctor, un ingeniero, un holgazán o si exageramos hasta a un asesino. El amor no hace diferencias, pero el tipo de relación que podamos construir con estas personas, a lo largo del tiempo sí producen una diferencia. De ello, se deduce que la relación con un holgazán o una persona fuera de la ley conocerá de más problemas y conflictos y posiblemente no llegue a buen término, a diferencia de otra con una persona que trabaja con principios y valores éticos distintos.
Timidez y viveza, ¿como agua y aceite?
A pesar de las diferencias físicas, psíquicas y sociales entre el hombre y la mujer, en realidad, en el fondo son bastante parecidos. Esto indica que actúan, se comportan, resuelven problemas o asumen posiciones ante determinadas situaciones de manera parecida, sin olvidar que, al mismo tiempo, cada individuo es un universo en sí mismo (de ahí la alta complejidad en las relaciones humanas). Los problemas siempre serán los mismos para uno y otro género, sin tener en cuenta quién es el tímido o quién tiene la viveza; y más aún en nuestros tiempos en los que el papel de la mujer se ha equiparado al del hombre y lo ha sobrepasado en más de un aspecto. El mayor problema en este tipo de pareja es el tiempo, el ritmo que cada uno de sus integrantes le da a su relación de pareja y la forma en que cada uno reacciona ante determinadas situaciones.
Encontrar pareja sin lupa pero con paciencia
Los famosos "príncipes azules hechos a medida" no se venden en el supermercado o en alguna tienda especializada; en ocasiones, las expectativas son muy altas, es decir, se ponen demasiadas barreras a la hora de buscar pareja, impidiendo que alguien se acerque. No se habla de salir a buscar una relación con el primer chico que aparezca, pero sí darse el tiempo para conocer a cada persona, saber de sus virtudes y sus defectos y ver si estos son compatibles con los nuestros. Siempre se debería buscar, limar asperezas para encajar mejor y ver si ello es posible. Esto es lo más difícil a la hora de buscar o conseguir pareja, lograr esa conjunción de deseo y caracteres, en tiempo y forma, ya que no solo uno decide, todo es y debería ser de a dos.
Defectos entre comillas; virtudes, ¿dónde están?
Si nos enfocamos tanto en uno o más defectos de la persona, también eso borra el todo positivo, es decir, lo bueno que posee o lo que aún nos queda por descubrir de ella y, por lo general, lo descartamos o marcamos en el acto dejándolo de lado. Haciendo una analogía, nos comportamos como caballos de carreras que, a la hora de correr, solo ven la meta y lo hacen, pensando solo en ella, sin ver o importarle lo que pasa alrededor.
Las redes sociales ¿son cómplices o enemigas para una futura relación?
Lo que hoy día definimos como redes sociales son exactamente eso: redes sociales, nada más. No es necesario ni alabarlas ni satanizarlas. El uso que cada persona le da es el centro de la cuestión en sí. En el estilo de vida vertiginoso que impone nuestra sociedad, se crearon las redes sociales, que no son más que una nueva herramienta a la hora de comunicarnos y están marcando una tendencia, debido al avance que representan, como en su momento lo hicieron el telégrafo o el teléfono. De seguro, ambos también pasaron a ser cómplices y enemigos en las relaciones de pareja. También debemos recordar que, como las redes sociales son una nueva herramienta de comunicación, aún nos queda mucho por aprender sobre ellas y las implicancias que pueden traer a nuestras vidas, así como aprender a discriminar sobre los beneficios o perjuicios que pueden producir.
La diferencia salarial, de estilos y de gustos ¿puede terminar con una relación?
En realidad no; por lo general, en nuestra sociedad, el hombre es el proveedor, aunque hay más mujeres cabezas de familia. Ahora, si esto difiere en la ecuación de pareja, a veces la situación se torna más complicada, pero debido a clichés impuestos por la sociedad. Y a los gustos y estilos de vida, uno se adapta, se puede aprender, como permanecer con gustos y estilos distintos, sin que ello signifique el fracaso de la pareja. Aun así, existen muchas parejas que utilizan estos puntos como agentes motivadores de rupturas.
Amor de tres: un mal negocio
A todos pueden gustarnos otras personas, admirar su belleza o intelecto, sin que ello signifique que hayamos dejado de amar a nuestra pareja, pero cuando esto supera la barrera de la simple admiración y modifica nuestra conducta con la pareja, más que una prueba, se convierte en indicador de que algo no está funcionando bien en nuestra relación.
¿Qué es mejor, chica con carácter o comprensiva en todo momento?
"Para los gustos, los colores" y "mucho de algo es perjudicial", frase que dice mucho. Al decir esto me refiero, a que de seguro habrá hombres que prefieran mujeres con carácter, como hombres que prefieran mujeres comprensivas o ambas a la vez, dependiendo de la situación. Las mujeres deberían lograr ser ambivalentes y responder de la manera en que la situación lo amerite.
El compromiso ¿ahuyenta al amor?
Cuando existe amor, el compromiso es una consecuencia del mismo; se torna en la base fundamental de una relación estable, ayudando a solidificarla a través del tiempo. Claro que a veces confundimos lo que esto simboliza y lo asociamos con la falta o pérdida de libertad. Sin darnos cuenta de que desde el momento que asumimos estar en pareja, nuestras libertades y responsabilidades se modifican.
Ingeniero, doctor u holgazán, ¿hay alguna diferencia cuando de amar se trata?
A la hora de amar, los sentimientos no conocen de barreras, gastos o costos de vida; entonces, sí es posible amar a un doctor, un ingeniero, un holgazán o si exageramos hasta a un asesino. El amor no hace diferencias, pero el tipo de relación que podamos construir con estas personas, a lo largo del tiempo sí producen una diferencia. De ello, se deduce que la relación con un holgazán o una persona fuera de la ley conocerá de más problemas y conflictos y posiblemente no llegue a buen término, a diferencia de otra con una persona que trabaja con principios y valores éticos distintos.