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El diseñador de calzados argentino Ricky Sarkany confesó a una revista chilena que solo una vez, y con humorada, se subió sobre los tacos que diseña y, tras la caótica experiencia, aseguró que no comprende cómo la mujer camina espléndida.
“Se calcula que una de cada seis personas sufre algún problema en los pies; esto se debe a la incorrecta elección del calzado. El uso de tacones altos causa molestias leves y severas: desde una inflamación simple hasta problemas en huesos y articulaciones. Esto ocasiona deformidad y desviación del dedo, callos y dolor plantar, entre los más frecuentes”, acota el traumatólogo Ricardo Gregor. En algunos casos, inclusive, pueden padecer trastornos por el sometimiento a una inestabilidad, y mayor desequilibrio en la columna lumbar, talón de Aquiles y rodillas.
El doctor subraya que estas alteraciones ocurren debido al desplazamiento del eje corporal hacia adelante, lo que obliga a los dedos a soportar todo el peso del cuerpo. Por esa razón, aparecen patologías no deseadas en una zona del pie no adecuada para ello. “Cuanto más alto sea el taco, mayor será la presión sobre las zonas citadas anteriormente. La parte delantera del pie soporta el 57 % del peso corporal con tacones de 4 cm, un porcentaje que se eleva al 75 % cuando la altura de estos se incrementa en 2 cm. Las mujeres padecen hasta cuatro veces más dificultades que los varones y los expertos lo atribuyen al uso de tacones.
A pesar de los riesgos para la salud, muchas mujeres se resisten a dejarlos de lado”.
La nueva propuesta cómoda
Según la diseñadora nacional de calzados Tanya Villalba, en sus inicios, optaba por proponer a sus clientas zapatos de 14 cm de alto. Actualmente, insiste en diseñar sandalias más cómodas, como las conocidas franciscanas, que poseen una base de goma acolchonada y forrada en cuero, por lo que el andar es más placentero. “Los pies descansan por más que tengan un pequeño taco, ya que la plataforma equilibra la posición del empeine”, explica.
Texto dbattilana@abc.com.py