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La pasarela nacional no estuvo exenta de las grandes tendencias que nacen en las capitales de la moda como París, Nueva York y Milán. El AFW fue una muestra de arte en genio, donde se apreció la temporada otoño-invierno 2012.
En todos los desfiles predominaron los estampados, las rayas, figuras geométricas, toques florales, animal print, telas en gamuza, seda, transparencias, encajes y gasas, que fueron protagonistas. Estuvieron llenos de líneas entrecruzadas en un sinfín de tamaños y diferentes estilos. Las capuchas y las capas se vieron en la pasarela, como también el cuero y los colores que brillaron en sus tonalidades.
Diseñadores nacionales e internacionales brillaron con propuestas únicas, que recapitulamos en cinco tendencias que marcaron para quedarse.
El color negro
Símbolo de elegancia y buen gusto. Por primera vez en los años 20, la transgresora Coco Chanel impuso esta tonalidad como una tendencia de moda. Este color representa al glamour y alude a la frase célebre “nunca te equivocas si vistes de negro”. Dicha filosofía fue interpretada con el mejor de los gustos por la diseñadora nacional Ilse Jara. Esta joven se destacó con una colección de un misticismo maravilloso con telas livianas que parecían tener vida en la pasarela. Su ingenio y creatividad mostraron una colección con formas novedosas, mezclando diferentes texturas y transparencias que enseñaban una sensualidad reminiscente y sutil.
Sus vestuarios eran una antología monocromática, cuya fuente de inspiración parecía tener un concepto con alma propia, que transportaba a la mitología de una imaginación legendaria.
Animal print
Durante los años 60, con la comercialización de las aerolíneas, nace una nueva tendencia de moda que se impuso en el mundo entero, debido a que los genios del diseño viajaban por el mundo y traían consigo nuevas inspiraciones.
Yves Saint Laurent fue uno de los pioneros y visionarios que llenaron las pasarelas con vestidos inspirados en el África y una colección famosa denominada Safari. Hoy en día, el animal print es tendencia en moda. Viene en todos los colores y se logra una gran variedad de leopardos, cebras, dálmatas, tigres, jirafas y serpientes. Es una jungla llena de ideas exóticas que atraen el ojo de cualquier espectador.
La diseñadora Ati Troche adornó la pasarela con estampados de animal print en colores subrreales. Sus diseños con estampados, magníficas telas de seda destellaron un look ultrachic. Se caracterizó por tener blusones y faldas largas muy voluminosas y abuchonadas, con diferentes estampados. Los colores metalizados fueron utilizados de manera magnífica, una colección de muy buen gusto y elegancia.
Bohemian
El estilo bohemio más que una tendencia es un estilo de vida. Surge en las calles parisinas durante el siglo pasado, cuando los gitanos se radican en la Ciudad Luz. En oposición a la clase aristocrática, los bohemios hacen referencia a escritores, poetas, artistas, personas que viven para amar el arte. Una de las novelas más famosas de este género literario hace alusión también a una de las revistas más trascendentales del mundo de la moda, Vanity Fair.
La diseñadora nacional Jessica Eulerich, para la marca María Sonia, logró que los espectadores viajen al París del siglo pasado, donde se mostraban dos estilos de vida totalmente diferentes. Sus diseños se mezclaban con sombreros y delicados encajes. Se destacaron prendas con mucha sensualidad y una silueta femenina, así como abrigos tejidos con formas holgadas y hombros asimétricos. Para la noche propuso un estilo que parece inspirado en el famoso club de los 70, Studio 54.
El naranja
El color rojo-anaranjado invadió las pasarelas mundiales desde temporadas pasadas y es tendencia nuevamente. Lo vemos en distintas tonalidades de carácter fuerte. Desde los más ricos y profundos tintos hasta el más vibrante y energético naranja.
Hubo una fuerte presencia de este fantástico color, tomando protagonismo y combinando con otras tonalidades fuertes y claras.
Las prendas, los maquillajes y calzados dejaron sus huellas y marcaron al color del momento. Varias marcas como Enzo Aquino, La Pelle, Farfalle, Chantall – Siempre y cuando, apostaron por esta imponente gama.
Aunque no tenga el mismo efecto que el rojo, puede conquistar y favorecer a la mujer, y por qué no decir al hombre de hoy, que se juega por combinaciones y complementos. Dentro de la psicología expresa la felicidad y libera las emociones negativas, estos valores adaptados por diseñadores.
La Bella Época
Emma Viedma, diseñadora de la marca Pierrot, hace una evocación al pasado. Una mezcla al estilo de Paul Poiret; aludiendo a la Belle Époque (Bella Época) y al Ballet Russe (Ballet Ruso), espectáculo icónico de aquellos tiempos.
Una colección ecléctica de periodos que mezclan nuestra cultura con historias pasadas de la moda europea. Telas majestuosas, coloridas y livianas, y finos encajes fueron seleccionados y aplicados con total delicadeza.
Sin duda, esta propuesta beneficia a la mujer elegante, sofisticada y clásica, que desea divertirse con toques excéntricos. Emma toma como protagonista el arte, la moda, decoración y cultura, implementando en piezas exclusivas una línea que ella define como “Bohemio Haute Couture” (Bohemio de alta costura). Con la suave melodía del piano clásico y el romántico cántico del Ave María, cerró su desfile con un imponente traje de novia, que formó parte de una colección que contaba un cuento cuyo final solo pudo ser el de “felices para siempre”.
En todos los desfiles predominaron los estampados, las rayas, figuras geométricas, toques florales, animal print, telas en gamuza, seda, transparencias, encajes y gasas, que fueron protagonistas. Estuvieron llenos de líneas entrecruzadas en un sinfín de tamaños y diferentes estilos. Diseñadores nacionales e internacionales brillaron en pasarela con propuestas únicas.