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Corrían los años 80, cuando la Policía stronista detuvo a un hombre a quien se lo vinculaba con un abuso sexual del que fue víctima una joven mujer. En 1983 Luis Óscar Manuel Arrizala González, actualmente con 68 años, fue condenado por primera vez por violación. Tras salir en libertad ya con el advenimiento de la democracia el hombre comenzó nuevamente a cometer violaciones y siguiendo el mismo patrón.
Arrizala era gestor en el Poder Judicial, pero se hacía pasar por abogado con un buen hablar y en ocasiones vistiendo traje y corbata aprovechaba para contactar con mujeres que buscaban su primera experiencia laboral. El mismo decía ser un profesional del Derecho, con contactos claves para conseguir empleo. Con un buen libreto ensayado y buena dicción convencía con mucha facilidad a las muchachas, a quienes les prometía ayuda.
Marcaba un encuentro con sus potenciales víctimas, las buscaba en una motocicleta y les decía que las llevaba a la entrevista de trabajo, pero en realidad se dirigía siempre hacia un burdel en la zona de 4 Mojones, donde abusaba reiteradas veces de las mujeres, para luego amenazarlas y dejarlas en la calle.
No se sabe a cuántas mujeres violó, pero las que se atrevieron a denunciarlo fueron cinco víctimas que llevaron a Arrizala ante los tribunales y en cada caso fue condenado a duras penas, al ser hallado culpable.
Actualmente Luis Óscar Arrizala enfrenta su sexto juicio oral y público por abuso sexual de una adolescente de 16 años. El tribunal de sentencia está integrado por los jueces Manuel Aguirre, Blanca Gorostiaga y María Luz Martínez.
El caso se inició en el 2011 cuando Arrizala conoció a la joven en la vía pública, le dio una tarjeta personal con nombre falso y se hizo pasar por abogado. Le ofreció trabajo y después de unos días la joven contactó con él, quien le marcó una cita. La pasó a buscar en su motocicleta y como era costumbre la llevó hasta el prostíbulo donde abusó sexualmente de la muchacha en varias ocasiones, hasta que la llevó nuevamente en su biciclo con destino a Asunción, pero la víctima en un semáforo se bajó de la moto y huyó pidiendo ayuda.
Arrizala fue detenido y ahora afronta un nuevo juicio donde se expone a una elevada condena.
Cinco condenas y tres procesos
Luis Óscar Arrizala tiene cinco condenas por abuso sexual y tres procesos más por el mismo delito, en uno de ellos en etapa final del juicio oral, que la semana pasada por dos veces logró suspender al cambiar de abogado. Arrizala es una persona de buen hablar, sus años recorriendo los pasillos de los tribunales le dotaron de mañas y con eso trata de ganar tiempo. “Creo que la presencia de la prensa en esta instancia del proceso no corresponde, por lo que pido que los periodistas se retiren, ya que se tiene que garantizar el derecho de la inocencia que me ampara”, dijo el martes pasado a la jueza Blanca Gorostiaga, al notar la presencia de cronistas de varios medios en la sala de juicios orales. Arrizala se aferra a no recibir una sexta condena, pero las pruebas en su contra son contundentes.
victor.franco@abc.com.py