Cargando...
Desde el 1 de enero de este año, Romina Núñez está desaparecida y el principal sospechoso es su marido, Raúl Díaz. Pues fue éste con quien estuvo por última vez el 31 de diciembre de 2018, cuando discutieron en la casa que habitaban en Costa Teguise de la Isla española Lanzarote.
Recién el 7 de enero, luego de la insistencia de la familia de la compatriota por saber qué pasó de ella, Raúl realizó la denuncia de su desaparición. Posteriormente, el 10 de ese mes, se comunicó a un programa de radio de España para manifestar que tras la discusión, salió de la casa a las 5:00 y retornó a las 15:00 del 1 de enero, pero ya no encontró a su esposa ni sus pertenencias.
El 13 de enero la Guardia Civil arresta a Díaz como sospechoso en el caso y el 15 de enero el mismo declaró que halló muerta a Romina, y que mantuvo escondido el cuerpo varios días en la casa. Luego intentó quemarlo, pero como no se consumió totalmente, tomó el cadáver y esparció sus restos por la costa de la isla. Ya al día siguiente, el juzgado ordenó su ingreso a prisión por maltrato físico y psicológico y posible homicidio.
El juzgado tenía noticias de que el 29 de diciembre del año pasado Romina envió mensajes por WhatsApp de que fue golpeada brutalmente. Además, tres días antes del casamiento denunció a Raúl por maltrato, pero la denuncia no corrió. Además, Romina salía de la casa y se refugiaba en el domicilio de una amiga por varios días, después de cada agresión de su pareja. La muerte de Romina, que todavía no se aclara del todo, marcó el trágico final a la violencia que sufría.
Hallazgo. El 5 de enero pasado un socorrista encontró restos orgánicos, en avanzado estado de descomposición y que sería de algún órgano vital, un pulmón, en la playa de Las Cucharas en Costa Teguise, isla Lanzarote. Los mismos fueron arrojados a un contenedor de residuos sólidos y luego recuperados el 15 de enero, luego de que el socorrista denunciara lo que halló.
Ya el 24 de enero, los responsables de investigar el paradero de Romina, confirmaron que los restos son de la paraguaya. Sin embargo, la Guardia Civil Española todavía aguarda la confirmación a través de la prueba de ADN.
ariel.espinoza@abc.com.py