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Sorpresivamente y luego de estar casi cinco meses prófugos, se entregaron en la Unidad de Delitos Económicos y Anticorrupción del Ministerio Público los presuntos cómplices de un esquema de lavado de dinero y asociación criminal instaurada por Darío Messer, el “hermano del alma” del expresidente de la República Horacio Cartes.
Los fiscales de Delitos Económicos y Anticorrupción René Fernández y Liliana Alcaraz tomaron las declaraciones indagatorias de Grinspun y Jiménez Viveros.
Tras declarar por más de seis horas, los mismos quedaron presos y al día siguiente el juez Humberto Otazú decretó la prisión preventiva de ambos y los remitió al penal de Misiones.
Durante sus declaraciones indagatorias, Jiménez Viveros y Grinspun dijeron que no sabían el paradero de Messer.
Ambos declararon que habían contactado por última vez con Messer a finales de abril de este año. “La fecha coincide con el inicio de la causa penal contra él (Darío Messer) en nuestro país y con el pedido de extradición de la justicia brasileña”, indicó el fiscal René Fernández.
Estas dos personas se habían presentado en el Banco Nacional de Fomento, donde intentaron retirar unos G. 2.000 millones de una de las empresas de Messer, antes de que se presentara imputación pero ya cuando el caso judicial abierto contra ellos tomó estado público.
Dicho monto ahora es administrado por la Secretaría Nacional de Administración de Bienes Incautados y Comisados (Senabico), junto a otros cuantiosos bienes.
“Prestadores de servicios”
Tanto Juan Pablo Jiménez Viveros como Ilan Grinspun estaban ensayaron en el Ministerio Público un mismo “libreto” y se presentaron solo como “prestadores de servicios” de las empresas habilitadas por Messer.
La fiscala Liliana Alcaraz indicó que, inclusive, los implicados presentaron contratos e indicaron que recibían solo paga mensual.
A su vez, precisaron que “desconocían el origen del dinero” y a qué se dedicaban las empresas Chai SA, Pegasus Inversiones SA, Matrix Realty SA y Gramonte SA.
Esto fue indicado por Jiménez Viveros a pesar de que aparece como uno de los dueños de la empresa inmobiliaria Matrix Realty SA, además de Pesasus Inversiones y en Chai SA era fiscalizador.
En este caso se había presentado solamente Adolfo Granada Cubilla, administrador de las estancias de Darío Messer, quien actualmente cuenta con arresto domiciliario.
Padre e hijo
En la presente investigación, continúan prófugos de la justicia Darío Messer y su hijo Dan Wolf Messer (ambos de nacionalidad brasileña).
En la imputación por lavado de dinero y asociación criminal, la Fiscalía señala que el prófugo y rebelde Messer y sus socios utilizaron fondos provenientes de sobornos (coimas) y de asociación criminal cometidos en Brasil, para abrir sus empresas y mover cuantiosas sumas de dinero.
“Eso les generó ganancias que fueron aplicadas en adquisiciones y operaciones financieras, bancarias, bursátiles e inmobiliarias en nuestro país que datan de 2011, pero con más asiduidad entre el 2014 y 2016”, explicó el fiscal René Fernández tras presentar la imputación penal.
En el esquema se utilizaron bancos de un paraíso fiscal como Luxemburgo, nuestro país y casas de valores.
Las primeras cifras reveladas por la Fiscalía indicaban que el Banco Nacional de Fomento (banco estatal) recibió nada menos que US$ 41.825.000 en la cuenta de la empresa Chai SA, durante cuatro años.
El banco Continental, por su parte, recibió US$ 200.000 y la compra de valores por US$ 300.000. El banco Basa (ex-Amambay), que pertenece al Grupo Cartes, también fue beneficiado con la comercialización de bonos del Tesoro por US$ 184.000. Asimismo, Messer compró bonos del Tesoro del Banco Itaú por US$ 55.000.
También, en la casa de valores Casa Puente Bolsa SA se compraron acciones y bonos y unos US$ 5.000.000, en el año 2015.
Otra firma presuntamente utilizada por Messer para lavar dinero fue la casa de cambios Yrendague, donde hubo canje y arbitraje por US$ 220.000. A su vez, adquirió acciones en Estados Unidos y Canadá por US$ 2.000.000 mediante las operadoras Goldman Sachs, Metlife y JP Morgan, entre 2015 y 2016.
Asimismo, a través de Chai SA compró en el 2015 un avión usado por un valor de US$ 525.000, pagados en tres cuotas.
Esos montos luego se dispararon cuando se encontraron más activos y adquisiciones de inmuebles en nuestro país, hasta llegar a la suma de US$ 100 millones.
En cuanto a los inmuebles, solo con una de sus empresas (Chai SA), Messer es dueño de propiedades que suman 9 veces la superficie total de Asunción.
Lava Jato
Darío Messer también está prófugo en el Brasil y tiene pendiente en nuestro país un pedido de extradición.
El mismo es requerido por ser pieza clave del escándalo de corrupción en el caso “Lava Jato”, donde es conocido como el “doleiro de doleiros” (cambista) y encargado de lavar el dinero cobrados de los sobornos y coimas.
Protección
Las operaciones sospechosas realizadas por el brasileño Darío Messer, el “hermano del alma” de Horacio Cartes fueron ocultadas deliberadamente por la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero (Seprelad), que depende en línea directa de la Presidencia de la República. El informe oficial sobre el prófugo contó con reportes de los años 2015, 2016 y 2017, lo que significaba que estaban al tanto de los posibles crímenes financieros. Recién el 17 de abril de este año, un informe de inteligencia fue remitido a la Unidad de Delitos Económicos del Ministerio Público y eso inclusive se dilató porque el trabajo ya era del 27 de diciembre de 2017.
La imputación
El 8 de mayo de este año, los fiscales René Fernández, Liliana Alcaraz y Hernán Galeano imputaron a Darío Messer, su hijo Dans Wolf Messer, y sus presuntos socios comerciales Juan Pablo Jiménez Viveros (primo de Horacio Cartes) y Adolfo Granada Cubilla. Luego, se amplió la imputación y se incluyó a Ilan Grinspun (brasileño). La presunción del Ministerio Público es que en nuestro país se montó un esquema delictual con fondos provenientes de sobornos, coimas y de asociación criminal cometidos en Brasil, para abrir empresas y lavar cuantiosas sumas de dinero. Los investigadores encontraron unos US$ 100 millones en bienes del brasileño.
El Lava Jato
Darío Messer está prófugo en Brasil, donde es considerado el “doleiro de doleiros” (cambista de cambistas) por su implicancia en el lavado de dinero del escándalo de corrupción conocido como Lava Jato. De hecho, la justicia paraguaya recibió primero un pedido de extradición porque hasta hace poco tiempo Messer residía en Alto Paraná. Posteriormente, resultó imputado porque saltó todo el esquema de lavado de dinero que montó en Paraguay, donde introdujo cifras exorbitantes de dinero ante la pasividad y hasta complicidad del gobierno anterior. Hoy, está rebelde y con orden de captura internacional en los dos países.
Roncha en comisión parlamentaria
La bicameral instauró una comisión especial para investigar al empresario prófugo Darío Messer y se generó roncha desde el inicio porque opositores no quieren que integren ni senadores ni diputados cartistas.
El diputado colorado de Itapúa, Walter Harms (ANR, cartista) se vio obligado a presentar su renuncia como miembro de la comisión para investigar la complicidad estatal con el prófugo brasileño. El mismo tuvo que retroceder tras reflotarse en los medios de prensa el encuentro que había tenido con Messer en Israel y posibles vínculos que pueda tener con el investigado.
Asimismo, generó reclamos la moción de que ingrese el senador Sergio Godoy (también cartista), lo que fue reclamado por la diputada liberal Celeste Amarilla.
“Fue abogado de Horacio Cartes. Hay presunción de nexo entre Messer y Cartes. Permanentemente me va a dar la sospecha de que el señor Godoy pueda pasar después esta información. No estoy diciendo que él va a filtrar, pero va a haber un manto de duda”, dijo la parlamentaria. Asimismo, el senador Rodolfo Friedmann (colorado abdista) indicó que el cartismo quiere tener “vista y oído” en la comisión.
Mientras tanto ya se produjo la primera reunión entre la fiscala general Sandra Quiñónez y miembros de la comisión especial.
Los bienes, administrados por Senabico
La Secretaría Nacional de Administración de Bienes Incautados y Comisados (Senabico) administra los millonarios bienes que dejó el brasileño Darío Messer en nuestro país cuando armó su esquema de lavado de dinero.
La defensa del prófugo de la justicia intentó litigar para oponerse a la transferencia de los bienes a la Senabico, para su administración provisoria debido a que hay expectativa de decomiso, pero la justicia no le permitió.
Los embargos de las cuentas en dólares y guaraníes que aparecen a nombres de las empresas de Messer, fueron levantados y el dinero fue transferido a la Secretaría. Están los G. 2 mil millones que se intentaron retirar del Banco Nacional de Fomento cuando estalló el escándalo.
Asimismo, la institución del Estado se hace cargo del avión Raytheon Aircraft, modelo 58, Baron, con matrícula paraguaya, valuado en US$ 525.000 y que está resguardado en el hangar de la empresa Aero Centro SA, propiedad del Grupo Cartes. El aparato aparece como propiedad de la empresa Chai SA.
Además, la titular de la Senabico, Karina Gómez, confirmó que la institución a su cargo ya administra ocho estancias del brasileño.
De estos inmuebles cinco están en la Región Occidental y tres en la Oriental. Messer cuenta con más de 10.000 hectáreas de tierras en total y unas 12.000 cabezas de ganado a la fecha, reveló Gómez.
Sin embargo, una investigación de ABC reveló que el empresario y cambista (“doleiro”) utilizó sus empresas habilitadas en nuestro país y a sus socios comerciales, para adquirir un total de 152 propiedades en todo el territorio nacional.
Sus inmuebles alcanzan una superficie total de más de 103.000 hectáreas, casi diez veces la superficie de Asunción.
Darío Messer figura en la nómina de 45 cambistas que cuentan con orden de captura impartida por la Policía Federal del Brasil. Todos están involucrados en un esquema de lavado de dinero que alcanza los US$ 1.652 millones.
griselda@abc.com.py