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Una de ellas del jefe de Eventos Deportivos de la Policía Nacional, comisario Manuel Sosa.
En una entrevista con el equipo deportivo de la 780 AM se refirió a un incidente que tuvo con los barrabravas o hinchada organizada, o como quiera que se llame, que son seguidores del club Olimpia.
Habló de que estaban alcoholizados, que igual los metieron al estadio para que no ocasionen daños en los alrededores e inclusive señaló que una vez que entraron al sector de Plateas intentaron derribar portones para llegar a las graderías, con intenciones de tomarse con otro grupo de hinchas de ese club.
El comisario utilizó tres veces la palabra negociar.
La pregunta que nos hacemos es ¿qué se tiene que negociar con un grupo de delincuentes que se disfrazan de hinchas?
¿Acaso con todo lo que estaba contando el comisario no era suficiente para que se los detenga?
También dijo el jefe policial que apelaron a los líderes de ese grupo para solucionar los problemas que generaban.
¿Desde cuándo se les da estatus a los seudolíderes de una hinchada para que se porten bien?
El otro caso es el que contó María Ramona Rodas, directora de Tránsito de la Municipalidad de Asunción a Humberto Rubin.
Explicó que los incidentes que se dieron con los vehículos estacionados en los alrededores del club Olimpia y la reacción de los vecinos, durante el concierto de Ricardo Arjona, tuvo como responsables a los cuidacoches.
Señaló que no es la primera vez, pero que no se puede hacer nada porque ni la Policía Nacional puede con ellos.
Preocupante por donde se mire.
La Policía está para hacer cumplir la ley y no precisamente para ponerse de rodillas ante los inadaptados.
ocaceres@abc.com.py