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El presidente del Banco Central del Paraguay, Carlos Fernández Valdovinos; el superintendente de Bancos, Hernán Colmán Rojas y Rolando Arréllaga, gerente general del BCP, remitieron un informe preliminar elaborado por los funcionarios de la Superintendencia de Bancos que fueron designados como interventores en el proceso de resolución de Ára SA de Finanzas y del cual surgieron serios indicios sobre la existencia de un daño patrimonial importante a la entidad. La denuncia se hizo el 5 de mayo pasado.
Del informe preliminar de irregularidades se desprende que los interventores (en fecha 30 de abril del corriente) realizaron arqueos generales para validar el saldo de cuenta de la caja, tanto de la casa matriz como de las sucursales. El arqueo arrojó como resultado una diferencia aproximada de -74.546.000.000 de guaraníes, en contrapartida a los saldos de balance declarados el 29 de abril de 2015, que ascendía a G. 77.805.000.000.
Del informe de los interventores se infiere que la diferencia citada estaba representada por los documentos obrantes en las cajas de las sucursales de Salto del Guairá, Pedro Juan Caballero y Ciudad del Este. Es decir, que en lugar de contabilizarse en efectivo, se contabilizaron documentos, tales como cheques devueltos, recibos de dinero y vales que no podían registrarse como dinero en efectivo en caja, como se hizo hasta el día antes de la intervención de la entidad financiera.
A continuación se especifica el origen de los faltantes encontrados al momento del arqueo general:
a) En la ciudad de Salto del Guairá, el faltante de dinero en moneda nacional registrado en la sucursal de Ára estaba presentado por cheques devueltos que datan de los meses de octubre y noviembre de 2014.
1) Una persona de nombre Reveca Villalba, entre octubre y noviembre de 2014, cambió cheques por efectivo por un total de G. 2.452.300.000. Estos cheques (seis en total) fueron rechazados por insuficiencia de fondos y por inhabilitación.
2) Luego aparece la misma Reveca Villalba junto con Sixto Quiñónez, Néstor Araujo y Cristiano Sassaki, quienes efectivizaron cheques y vales por US$ 2.461.804. Los cheques fueron rechazados por los bancos por insuficiencia de fondos o cuenta cancelada.
b) En la sucursal de Pedro Juan Caballero, el faltante en moneda extranjera estaba representado por recibos de dinero en concepto de “operaciones por canje” u “operaciones de cambio”.
1) Entre los que cobraron un total de US$ 5.735.000 figuran Clacir Scapini, Moises Ferrerr Gomes, Jimar Do Sul, Janes Tornan Santos, Ilzon Ferreira De Siqueira, Artur Pitazski, Marcell Brinec, Lucía Correa, Augusto Guarilim, Jacira Sobhie, Luzenir Ramos, Mario Sinton, Luis Sobrinho, Augusto Solada y Claudimara Toledo.
c) En Ciudad del Este, el faltante en moneda extranjera estaba representado por pagarés a favor de Ára SA de Finanzas:
1) Los pagarés, por un total de US$ 6.111.346, eran de AJP SA y fueron firmados por Alessandro Ismael Maciel.
Luego de iniciada la correspondiente investigación fiscal, se pudieron recabar elementos de sospecha que dan cuenta de que se habrían cometido hechos punibles de la siguiente manera:
Con relación al faltante de dinero en la sucursal de Ára SA de Finanzas de Salto del Guairá, se tiene que, en concepto de operaciones de cambio, entre el 30 de octubre y el 4 de noviembre de 2014, el señor Cristiano Sassaki presentó 11 cheques librados por la señora Reveca Villalba.
Las operaciones de cambio, realizadas con cheques provenientes de un cliente (Reveca Villalba) con una línea de operación cuyo límite era de 100.000 dólares americanos y el tipo de transacción comercial consistente en realizar cambio de divisas con cheques, constituyen operaciones de alto riesgo, quebrantándose de esa forma el deber de la correcta administración, dado que se recibieron cheques con montos muy superiores a los habilitados para operar con Reveca Villalba.
La orden de realización de las operaciones de alto riesgo fueron dadas por Carlos Sosa Palmerola y fueron ejecutadas por Arcenio Céspedes y Hugo Ortiz.
Todos los cheques fueron presentados en ventanilla entre el 4 y el 7 de noviembre de 2014 y rechazados ya sea por insuficiencia de fondos o por inhabilitación de cuenta.
En contrapartida de los cheques recibidos, Ára de Finanzas realizó las correspondientes transferencias de dinero a los beneficiarios presumiblemente indicados por Cristiano Sassaki, haciéndolo de dos formas por el SIPAP y en efectivo.
Paralelamente, con el fin de ocultar los faltantes de dinero existentes en la sucursal de Salto de Guairá, Hugo Ortiz elaboró tres vales de contenido falso.
Por otro lado, también se dieron faltantes de dinero por haberse realizado operaciones de cambio a través de cheques de Anacleto Villalba y Sixto Quiñónez, los cuales no fueron cobrados pero que fueron contabilizados como efectivo por el tesorero Arcenio Céspedes.
Estas operaciones tampoco pudieron ser realizadas puesto que según el perfil de cliente, Anacleto Villalba solo podía realizar operaciones hasta el monto de 100.000 dólares americanos.
Cabe aclarar que conjuntamente los cheques y los vales fueron utilizados por Arcenio Céspedes cuando efectuó el arqueo de caja de fecha 28 de abril de 2015, donde hizo constar que el total de efectivo en moneda dólares americanos existente en la bóveda era de US$ 2.464.305, cuando que en realidad esta suma no existía.
El perjuicio total por los faltantes de dinero en la sucursal de Ára SA de Finanzas de la ciudad de Salto del Guairá asciende a la suma de G. 2.452.300.000 y US$ 2.261.804.
En la sucursal de Ára SA de Finanzas, de Pedro Juan Caballero, el faltante de dinero se encontró representado por recibos de dinero en concepto de operaciones de canje u operación de cambio, supuestamente suscriptos entre los días 26 al 30 de marzo del año 2015, pero que en realidad serían falsos y que habrían sido elaborados y firmados en un mismo momento.
En ese sentido, se tiene que conforme al siguiente cuadro las personas que a continuación se detallan habrían realizado operaciones de cambio en moneda extranjera, específicamente en dólares, y para justificar ante la entidad el faltante de dinero, fueron elaborados y suscriptos recibos de dinero en los que los supuestos beneficiarios refieren haber recibido dichas sumas de la Financiera Ára SA.
Si bien figuran como clientes, sus límites de operaciones eran inferiores a las supuestamente realizadas, teniendo en cuenta el perfil de cliente remitido por los interventores del BCP.
Por otra parte, es dable mencionar que según el sistema informático de cambios de la Financiera Ára SA, los últimos movimientos de los clientes cuyos nombres obran en los recibos mencionados no coinciden con las fechas en que supuestamente realizaron la operación de cambio, por lo que existen indicios suficientes para sostener que los documentos presentados no provienen de quienes los suscriben.
El perjuicio total por los faltantes de dinero en la sucursal de Ára SA de Finanzas de la Ciudad de Pedro Juan Caballero asciende a la suma de US$ 5.735.000.
En la sucursal Ára SA de Finanzas de Ciudad del Este se registró un faltante de US$ 6.111.346 representados por pagarés a favor de Ára SA de Finanzas, suscritos en los meses de febrero y marzo de 2015, por la empresa AJP SA.
Por orden de Víctor Daniel Valdez, los montos de los pagarés eran contabilizados como efectivo para respaldar el arqueo de caja de dicha sucursal y justificar el faltante de dinero; sin embargo, a la fecha de la intervención del BCP, los mismos no habían sido efectivizados pese a encontrarse vencidos, y de la verificación de la documentación obrante en la sucursal tampoco fue hallado ningún documento que respalde algún tipo de operación respecto a los mismos.
Existe la sospecha de que los pagarés fueron utilizados para justificar el faltante de dinero existente en la sucursal, el que según el informe elevado por el señor Carlos César Brítez Araujo, auditor de la Empresa, fue retirado por Carlos Sosa Palmerola, dos semanas antes de producirse la intervención, en dos partes, según le manifestó el tesorero Gustavo Vera.
El daño patrimonial
El perjuicio total por los faltantes de dinero en la sucursal de Ára SA de Finanzas en Ciudad del Este asciende a la suma de US$ 6.111.346.
Por otro lado, cabe destacar que el perjuicio total a la Financiera Ára SA de Finanzas por el faltante de dinero en las tres sucursales (Salto del Guairá, Pedro Juan Caballero y Ciudad del Este) asciende a la suma de US$ 14.308.150 y G. 2.452.300.000, según lo señalado en la imputación del Ministerio Público.
Vales figuraban como efectivo
Con relación al faltante de dinero en la sucursal de Salto del Guairá, se tiene que en concepto de operaciones de cambio, entre el 30 de octubre y el 4 de noviembre de 2014, el señor Cristiano Sassaki presentó 11 cheques librados por la señora Reveca Villalba.
Las operaciones de cambio realizadas con cheques de Reveca Villalba, con una línea de operación cuyo límite era de 100.000 dólares y el tipo de transacción comercial consistente en realizar cambio de divisas con cheques, constituyen operaciones de alto riesgo, quebrantándose de esa forma el deber de la correcta administración, dado que se recibieron cheques con montos muy superiores a los habilitados para operar con Reveca Villalba. La orden para las operaciones de alto riesgo fue dada por Sosa Palmerola y fue ejecutada por Arcenio Céspedes y Hugo Ortiz.
Todos los cheques fueron presentados en ventanilla entre el 4 y el 7 de noviembre de 2014 y fueron rechazados, ya sea por insuficiencia de fondos o por inhabilitación de cuenta.
En contrapartida de los cheques recibidos, Ára realizó la correspondiente transferencia de dinero a los beneficiarios presumiblemente indicados por Cristiano Sassaki.
A través del Sistema Nacional de Pagos (SIPAP) fueron beneficiados: Innova Agro con G. 157.500.000; Reveca Villalba con G. 675.000.000; Cristiano Sassaki con G. 299.250.000; Reveca Villalba con G. 540.000.000, Cristiano Sassaki con G. 591.250 y más otro monto por G. 591.250.000.
Los montos transferidos a través del Sistema Nacional de Pagos fueron cargados por Francisco Sarubbi (Jefe de Cambios) y autorizados por Liliana Franco (Jefe de Sistema de Pago). Ambos ayudaron a transferir el millonario monto señalado en el párrafo anterior.
En efectivo se transfirieron los siguientes montos y que fueron ordenados por Arcenio Céspedes:
Para Arnildo Montanía Alegre 203.077 reales; 203.077 reales; 217.800 reales y a nombre de Innova Agro US$ 133.333.
También Hugo Ortiz dispuso transferencia en efectivo de US$ 8.700 a Rian Augusto Tormenta.
Paralelamente, con el fin de ocultar los faltantes de dinero existentes en la sucursal de Salto del Guairá, Hugo Garcete elaboró tres vales de contenido falso.
Por otro lado, también se dieron faltantes de dinero por haberse realizado operaciones de cambio a través de cheques de Anacleto Villalba y Sixto Quiñónez, los cuales no fueron cobrados, pero que fueron contabilizados como efectivo por el tesorero Arcenio Céspedes.
Cabe aclarar que conjuntamente los cheques y los vales fueron utilizados por Arcenio Céspedes, cuando efectuó el arqueo de caja en fecha 28 de abril de 2015, en el que hizo constar que el total efectivo en moneda dólares americanos existente en la bóveda era de US$ 2.464.305, cuando en realidad este suma no existía, dice la imputación que presentaron los fiscales que investigan el vaciamiento.
Faltantes en dos sucursales
En la sucursal de Ára de Ciudad del Este se registró un faltante de US$ 6.111.346, representados por pagarés a favor de la financiera, suscritos en los meses de febrero y marzo de este año por la empresa AJP SA.
Por orden de Víctor Daniel Valdez, los montos de los pagarés eran contabilizados como efectivo para respaldar el arqueo de caja de dicha sucursal y justificar el faltante de dinero. Sin embargo, a la fecha de la intervención del Banco Central del Paraguay los mismos no habían sido efectivizados pese a estar vencidos; y de la verificación de la documentación obrante en la sucursal tampoco fue hallado ningún documento que respalde algún tipo de operación respecto a los mismos.
Existe la sospecha de que los pagarés fueron utilizados para justificar el faltante de dinero en la sucursal, el que según el informe elevado por Carlos Brítez Araújo, auditor de la empresa, fue retirado por Carlos Sosa Palmerola, dos semanas antes de producirse la intervención. El retiro fue en dos partes, según manifestó el tesorero Gustavo Vera.
El perjuicio total por los faltantes de dinero en la sucursal de Ára SA de Finanzas en Ciudad del Este asciende a la suma de US$ 6.111.346.
Sucursal de Pedro Juan
El faltante de dinero estaba representado por recibos de dinero en concepto de operaciones de canje o de cambio, supuestamente suscritos entre los días 26 al 30 de marzo del año 2015, pero que en realidad serían falsos y que habrían sido elaborados y firmados en un mismo momento.
En ese sentido, se tiene que las personas involucradas habrían realizado operaciones de cambio en moneda extranjera, específicamente en dólares y para justificar ante la entidad el faltante de dinero, fueron elaborados y suscritos recibos de dinero en los que los supuestos beneficiarios refieren haber recibido dichas sumas de la Financiera Ára.
Si bien figuran como clientes, sus límites de operaciones eran inferiores a las supuestamente realizadas, teniendo en cuenta el perfil del cliente remitido por los interventores del Banco Central del Paraguay.
Por otra parte, es dable mencionar que según el sistema informático de cambios de la financiera, los últimos movimientos de los clientes cuyos nombres obran en los recibidos no coinciden con las fechas en que supuestamente realizaron la operación de cambio, por lo que existen indicios suficientes para sostener que los documentos presentados no provienen de quienes los suscriben.
El faltante en la sucursal de Pedro Juan asciende a US$ 5.735.000.
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