Fiscales ampliaron imputaciones contra playeros

En el proceso abierto por el multimillonario robo de dinero público con tarjetas magnéticas para carga de combustibles en móviles de la Policía Nacional, los agentes fiscales anticorrupción y de delitos económicos Aldo Cantero y Lionel Piñánez ampliaron imputaciones contra playeros de estaciones de servicios de conocidos emblemas. En el caso permanecen como imputados, por hurto y otros delitos, el excomandante de la Policía Nacional Francisco Alvarenga, su hijo Francisco Alvarenga Rotela y los policías Carlos Joel Jara, Juan Mendoza, Roberto Osorio y su esposa, Ada Liz.

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En un escrito presentado al juez Gustavo Amarilla Arnica, los fiscales ampliaron la imputación en los siguientes términos:

De conformidad a las disposiciones establecidas en el Código Procesal Penal, se presenta el acta de imputación por los delitos de hurto y estafa, en calidad de autores y cómplices, en contra de los señores Miguel Ángel Barrios, Robert Melanio Flores Melgarejo, Humberto Wilfrido Ayala Servín, Gustavo Aquino, Claudio Ramón Montiel Garcete, Carlos Manuel Gómez Portillo y Pedro Maximiliano Delgado.

Antecedentes

La presente causa se inicia a raíz de la denuncia presentada el 13 de mayo de 2015 por el señor Francisco de Vargas, ministro del Interior, en donde manifiesta la existencia de supuestas irregularidades detectadas en el marco del Convenio suscrito entre Petropar y la Comandancia de la Policía Nacional, para la provisión de combustible a través de las Tarjetas Flota – Petropar, y que tendrían relevancia penal.

En el mismo escrito de denuncia, el señor Francisco de Vargas manifiesta que en el mes de abril de 2015, en el marco del Convenio mencionado, se habría solicitado irregularmente la activación de 186 (ciento ochenta y seis) tarjetas magnéticas para la provisión de combustibles para vehículos de inteligencia y antisecuestros de la Policía Nacional, que a la fecha registran un consumo total de G. 1.159.242.441

Relato de lo hechos

En el marco del convenio suscrito entre Petropar y la Comandancia de la Policía Nacional para la provisión de combustible a través de las Tarjetas Flota – Petropar, el Suboficial Roberto Osorio Romero, en connivencia con su superior el comisario principal Juan Mendoza Pérez, tesorero, dentro de la División Combustible de la Comandancia de la Policía Nacional, solicitaron en múltiples ocasiones la habilitación y posterior entrega de nuevas tarjetas libres (tarjetas utilizables al portador sin número de chapa).

Utilizando el trámite pactado con Petropar, es decir envíos a través de un email designado por la Comandancia para el efecto, con la posterior remisión física de las notas que eran firmadas aparentemente de forma indistinta por los señores Juan Mendoza Pérez y Roberto Osorio, siendo el autorizado para firmar las notas de pedido únicamente el primero de ellos.

A través de dicho trámite se realizaba una declaración aparentemente falsa, ya que no existía autorización para seguir solicitando nuevas tarjetas, y con la posterior entrega de Petropar a los efectivos policiales, el perjuicio de la Policía Nacional.

Posteriormente, los señores, Miguel Ángel Barrios, Robert Melanio Flores Melgarejo, Humberto Wilfrido Ayala Servín, Gustavo Aquino, Claudio Ramón Montiel Garcete, Carlos Manuel Gómez Portillo y Pedro Maximiliano Delgado, como playeros de uno de los emblemas (Barcos y Rodados – Bahía) que trabajan con Petropar, utilizaban las tarjetas libres, del siguiente modo: una vez que varios clientes iban comprando combustible en la estación de servicios, y se acumulaba el dinero en billete, ellos utilizaban las tarjetas para hacer coincidir dichas compras de combustible, como si quienes lo compraran fueran efectivos de las Policía Nacional; por tanto, no existía faltante alguno y los playeros se apropiaban de parte de los billetes para su aparente distribución con los policías que se encuentran implicados en la presente investigación; todo esto, en principio sin conocimiento de los dueños de los establecimientos de distribución de combustibles. Otro perjuicio patrimonial era consumado a través de esta conducta, ya que aunque figure como que se usaron las tarjetas de Petropar, es distinto el monto de dinero que ingresa a los propietarios de los establecimientos de combustibles cuando paga el particular con dinero en billete, que cuando se hace a través de tarjetas de Petropar, ya que este ente tiene un convenio con las empresas y el precio es diferenciado a favor del ente estatal. Los imputados, a través de la modalidad que fue expresada, se habrían apropiado de la cosa mueble ajena, en este caso del dinero, desplazando de su propiedad a los propietarios de los establecimientos de combustibles, para su posterior repartición con efectivos policiales.

eruizdiaz@abc.com.py

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