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“…voy a tratar de decir todo lo que me acuerdo de ese día. Recuerdo que ese día me fui a Cambios Chaco, me dio plata mi papá y tenía que pagar el alquiler de mi departamento. Salí a las 10 de la mañana, me fui a Cambios Chaco, y de ahí me fui caminando al lugar donde vivía. Entré a la panadería para pagarle a la encargada del departamento, no estaba, entonces me fui al departamento. Entro y me percaté de que alguien subía la escalera; él entró y me empujó adentro, y pasó eso. Llamé al 911 y yo quedé adentro, me identifiqué y por el susto empecé a llamarles a mi papá y a Carlos, pero no les decía qué había pasado por el susto.
No sabía qué hacer, tenía miedo de abrir la puerta porque tenía miedo que volviera a atacar; eso pensaba yo. Después recuerdo que golpearon la puerta, y era la Policía. Me preguntaron y les dije que yo llamé y el policía me contó que abajo había un cadáver y no sabía por qué hay un cadáver. Ahí me asusté más todavía; lo que se me vino en la mente era la magnitud de lo que había pasado. Vi el arma y pensé en mi carrera y qué iba a pasar conmigo, hablaba toda la hora con mis padres, no podía salir de ahí, agarré el arma y tiré donde están los zapatos. Tenía miedo de decir lo que había pasado. Empezó a llegar mucha gente y no le conté a nadie; supuestamente yo le encontré, y por eso llamé al 911; durante ese tiempo no le conté nada a nadie. Tenía mucho miedo”.
En declaraciones a la prensa, Zully insistió en que es víctima de una injusticia.
“Aunque enfrente 50 juicios, es evidente, no sé cómo decirles a las personas que cuando alguien viene a violarte, tenés que defenderte. En este país hay mucha inseguridad. Los responsables por violaciones no son detenidos”, expresó.