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La pericia balística realizada tras la reconstrucción del crimen comprobó que el conductor del vehículo Hyundai i10, color blanco, interceptado el 15 de junio de este año en la vía pública, en la calle Epopeya Nacional casi Barranco del Río Paraguay, zona del Botánico, recibió el disparo desde atrás, a una distancia de 50 centímetros a 1 metro.
De acuerdo al informe al que tuvo acceso ABC Color y que data del 22 de junio, la posición del guardia privado Julián Erenio Benítez Ojeda (45 años), imputado y preso por homicidio doloso, revela que el disparo entró en el vidrio trasero, que tiene un orificio de entrada.
“Se procede a la determinación de la posición del tirador con base en el análisis de correspondencia de trayectoria del proyectil del automóvil, del ángulo de tiro de arma, concluyendo cuanto sigue: El ángulo de tiro del arma en el momento del disparo corresponde a 11° de arriba para abajo, en línea con la trayectoria del proyectil en el automóvil a una distancia aproximada de 0,50 a 1 metro de la ubicación del orificio de entrada en la luneta del mismo, siendo el arma utilizada para el disparo el revólver calibre .38 Special, marca Taurus, serie QK585708, según el informe balístico”, refiere el informe realizado por el oficial inspector David Cantero.
Asimismo, se indica que la trayectoria del proyectil fue de atrás para adelante, perpendicular a la estructura posterior del automóvil y con la línea horizontal, con orientación descendente (de arriba hacia abajo).
Esta prueba contradice al otro guardia imputado Óscar Tomás Blanco (30), con arresto domiciliario. Este último dijo que él primero sufrió una caída por atropello de la víctima durante la persecución, pero el disparo no fue desde el suelo. Benítez, por su parte, se abstuvo de declarar en sede del Ministerio Público.
La médica forense Alba Torrasca determinó que la víctima recibió el proyectil en la región mandibular, específicamente en el maxilar inferior izquierdo, con orificio de entrada del proyectil en la región de la nuca lado derecho, atravesando en dirección perpendicular de abajo hacia arriba y de derecha a izquierda, perforando el eje del tronco cerebral seccionándolo. El proyectil quedó alojado en el maxilar inferior, perforándolo, con un orificio de aproximadamente 2 centímetros de diámetro.
Blanco también declaró que el informe de Protek fue “confirmado”, un código que significa robo de vehículo y que en todos los casos de este tipo, se avisa a la Policía Nacional, ya que ellos solo hacen el seguimiento del rodado. Sin embargo, extrañamente esto no ocurrió.
Hermana hizo el pedido
Romina Benítez Torres fue quien realizó el pedido de rastreo de su vehículo el 15 de junio pasado. La joven declaró ante la fiscala Sara Torres y ratificó que pidió la clave para monitorear el auto que llevó sin permiso la víctima y el caso se pasó como robo de vehículo.
La joven dijo que su hermano le pidió prestado el automóvil Hyundai i10, blanco, el 15 de junio y que, como se negó, este salió de todos modos de la empresa de su familia ubicada en San Lorenzo.
A raíz de esto la testigo indicó que decidió utilizar el sistema de monitoreo del vehículo con la firma Protek. Por tal motivo, dijo que llamó al hijo de uno de los dueños, Fernando Fretes, y le pidió su intermediación para acceder a una contraseña y seguir el rodado a través de su computadora. La familia creía que Mauricio iba a realizar su terapia de despedida de adicción (a drogas) porque al día siguiente iba a ingresar a rehabilitación. Alegó que tras el pedido de contraseña le llamó uno de los dueños, Luis Fretes, a quien le solicitó lo mismo y acotó que su hermano era inofensivo porque estaba lastimado. La comunicación se interrumpió cuando dijeron que “hubo disparos” y su padre confirmó lo peor cuando fue a la escena del crimen, especificó.
Proceso sin juez y con fiscal interino
El proceso por el homicidio de Mauricio Benítez actualmente está trabado, sin juez.
Esto es así porque Óscar Delgado se inhibió tras la inclusión de los directivos Luis Fernando Fretes Schinini, con cargo de director general, y José Castillo Samaniego, con rango de gerente, por hechos punibles por violación a la ley de armas. Por el homicidio doloso están imputados los guardias Julián Benítez y Óscar Blanco.
La fiscala Teresa Ruiz Díaz decidió incluir a los directivos Monital SRL (del grupo Protek), con hecho punible considerado crimen, por lo que ordenó detención y pidió prisión preventiva. Fue recusada por la defensa y su interino Jorge Noguera levantó las órdenes de detención.
Supuestamente, Protek debía gestionar la portación de sus armas para cada guardia e informar a la Dimabel. Sin embargo, la defensa cuestiona el artículo 94 inc. d de la Ley N° 4036/2010, que establece penas por “prestar” un arma de fuego a un “tercero” sin comunicación a la autoridad competente. La empresa ratifica que los guardias Benítez y Blanco son sus empleados y la portación está a nombre de Protek.
griselda@abc.com.py