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A diferencia de sus parientes, no tiene forma de esfera, son hojas largas, de color verde oscuro (también hay moradas) y muy rizadas, Es justamente en sus hojas de color verde intenso en las cuales se concentran vitaminas y minerales en una cantidad que nunca hubiera imaginado. Por estas características, la kale se ha convertido en la estrella de los superalimentos.
Es muy popular en Europa, donde es una verdura tradicional de las fiestas decembrinas, especialmente en Alemania. Llegó a los Estados Unidos en la década de 1980 y, en los últimos años, ha ganado muchísima popularidad por sus propiedades y porque se convirtió en la verdura preferida de las celebrities.
Originaria de Asia menor, de donde llegó a Europa alrededor del 600 d.C., actualmente se cultiva en los países del norte de Europa, así como en la costa noroeste de Norteamérica. Se recolecta en los meses más fríos; de hecho, hay zonas en las que se espera que haya fuertes heladas nocturnas, ya que aseguran que, de este modo, se consigue un repollo más dulce, porque el almidón de las hojas se transforma en azúcares. Esto se debe a que las enzimas fosfofructoquinasa se frenan cuando hay temperaturas muy bajas, mientras que la fotosíntesis sigue produciendo azúcares.
La kale (y no el kale, puesto que es una col) es un vegetal y, como todos los de su familia, es muy bajo en calorías. Pero es una verdura nutricionalmente densa. La porción del tamaño de una taza contiene escasas 33 calorías, pero tiene más calcio que la leche, más hierro que la carne, una gran cantidad de vitamina C, K y A, y más proteínas de hidratos de carbono. También se estudian sus propiedades anticancerígenas y desintoxicantes, que limpian hígado y sangre.
La familia de las coles (Brassica oleracea) es muy amplia, sin embargo, la kale tiene además sus propias variedades: kale de hoja rizada, kale de hoja plana (un poco más amarga), kale rojo ruso, kale toscano, kale dinosaurio. Todas tienen en común ese color verde especial, sus hojas crujientes y fibrosas, además de un sabor único.
Además de cocinarse como el resto de las verduras de hoja, la col kale se suele consumir cruda, en ensaladas o zumos, para aprovechar al máximo sus bondades nutricionales, pues muchas propiedades de los alimentos se van o disminuyen cuando se cocinan. Las recetas con kale incluyen ensaladas, guisos, sopas, pizzas, albóndigas, pastas para untar, batidos energéticos, panes vegetales y muchas recetas tradicionales en su versión con kale, por ejemplo, la ensalada César con esta col en vez de lechuga.
En Asunción ya se consigue en algunos puestos del Agroshopping y del Abasto Norte. Si van a comprar kale, hay que tener en cuenta que las hojas deben estar tersas, estas son bastante largas, pueden medir unos 40 cm. También deben tener un color vivo y su tronco debe estar bien firme. Se conservan en la parte más baja de la heladera, hasta una semana.
La estrella de las estrellas
Muchas celebridades han confesado que no pasan un día sin comer su verdura preferida. La revista People enumera entre ellas a Jennifer Aniston, Heidi Klum, Camila Alves, Sarah Michelle Gellar, Kevin Bacon, Ryan Gosling, Bette Midler, las Kardashian, Anne Hathaway, Nick Jonas y Gwyneth Paltrow.