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Panapén (Artocarpus altilis)
Es el fruto del árbol del pan o árbol pana, una especie con cientos de variedades de árboles distribuidos desde el sudeste asiático, la Polinesia, Oceanía y hasta las áreas tropicales del planeta, especialmente la zona de las Antillas. La pana, panapén o pan es una fruta tropical de la familia de la yaca que tiene forma redonda u ovalada, dependiendo de la especie y, por lo general, son de gran tamaño en comparación a otras frutas, ya que puede llegar a pesar entre 2 a 4 kg. Su corteza es de color verde y textura, gruesa y rugosa, aunque puede variar a un color amarillo a medida que avanza su madurez. Su pulpa es suave y cremosa, y se puede comer cruda. Es un alimento versátil en la cocina y considerado básico en muchas regiones tropicales. Se utiliza como acompañante de la comida principal, así como es el arroz, vegetales, el plátano y otros. Los frutos que no hayan madurado, caracterizados por su color verde, pueden prepararse cocidos, asados o tostados, mientras que los ya maduros pueden cortarse en rodajas y comerse crudos. Sin embargo, los frutos maduros pueden resultar insípidos, por lo que, muchas veces, son consumidos verdes. Las semillas de los frutos que caen al suelo, muy maduros, se cuecen, pelan y consumen directamente, tienen un sabor parecido a las castañas.
Pantana (Cucurbita melanosperma)
Fruto de la pantanera, una especie de enredaderas trepadoras de fruto comestible de la familia de las cucurbitáceas, cultivada a grandes alturas para el uso de su pulpa en la fabricación de dulces. Originaria de los Andes americanos, es conocida con una variedad de nombres locales (alcayota, cayote, lacayote, chiclayo, chilacayote, cidra, calabaza confitera, calabaza boba, cabello de ángel, victoria). A bajas alturas se la puede cultivar como pie de injerto de otras enredaderas cucurbitáceas, como melones y pepinos. Su fruto es ovalado, de corteza lisa y verde, con manchas blanquecinas y amarillentas. Tiene una pulpa blanca fibrosa que, al hervirse, se despega en hilos translúcidos, semejante a una cabellera. Con ella se hace el dulce llamado cabello de ángel, especialmente en Navidad.
Paraguayo (Prunus persica var. Platycarpa)
Es una fruta semejante al melocotón, pero con forma aplastada. Conocida en España como paraguayo o paraguaya, es una especie del género prunus, procedente de una mutación natural del melocotonero. Del paraguayo existen diferentes variedades: de pulpa blanca, con o sin vetas verdosas o rojizas, de pulpa amarilla, total o parcialmente desprendida de la semilla. Nada tiene que ver con en Paraguay; de hecho, dentro de Europa se cultiva solo en España, concretamente en Murcia y Aragón, y su producción es tan limitada que solo se vende dentro de ese país. Su aspecto es parecido al melocotón, pero se diferencia por su forma achatada. La piel y el color sí que son semejantes a los melocotones, al igual que su sabor, aunque los paraguayos tienen un sabor mucho más intenso. Al igual que el melocotón, el paraguayo proviene de Asia, aunque posteriormente llegó a la costa mediterránea y a los Estados Unidos, alrededor del 1800. En China, el paraguayo se cultiva desde hace siglos junto con los melocotones, siendo una fruta muy apreciada tanto por su calidad nutritiva como su exquisito sabor.