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El metabolismo es la suma de todas las reacciones químicas de nuestro organismo para producir el cambio o transformación del alimento en calor o combustible para el cuerpo. En cada uno de nosotros es único y trabaja a velocidades diferentes. Un metabolismo sano y funcional nos permite tener la cantidad exacta de energía disponible para usar, además de una estructura fuerte y estable.
Un metabolismo lento o enfermo no puede acceder eficientemente al combustible de la comida que se ingiere, así que en lugar de quemar ese combustible como energía, lo conserva como grasa en el cuerpo.
Tenemos un metabolismo basal, que es el consumo mínimo de energía que nuestro cuerpo necesita para seguir viviendo. Este gasto calórico mínimo varía mucho entre distintas personas, y es el culpable de que dos personas con actividades y alimentación idénticas tengan distinto peso. La forma de realizar la digestión y las diferencias en la temperatura corporal son las variables que producen esas diferencias; estos valores son genéticos y prácticamente no admiten cambios de forma natural.
Sin embargo, el metabolismo puede “acelerarse”, entendiendo esto como aumentar el consumo de calorías en reposo, de muchas formas. La más aconsejable es aumentar la masa muscular. El músculo necesita de una continua alimentación aunque no esté haciendo ningún esfuerzo. Por lo que si tenemos más material muscular, tendremos más consumo de calorías aunque no estemos haciendo nada.
Qué hacer
1 Alimentarte cinco veces al día.
2 Comer durante la primera media hora después de despertar todos los días.
3 Seguir el plan por 28 días.
4 Apegarte a los alimentos indicados.
5 Seguir el orden de las fases.
6 Beber 2 litros de agua cada día.
7 Elegir alimentos orgánicos siempre que puedas.
8 Ejercitarte según lo indicado.
7 maneras sanas de acelerar el metabolismo
Cuantos más de estos tips incorpores, más cantidad de calorías vas a gastar.
1 Siempre desayuna ni bien te levantes. Saltear el desayuno significa que tu cuerpo pasa 12 o más horas sin ingerir nada y el cerebro recibe una señal de que no hay comida disponible. Como un mecanismo de defensa disminuye el metabolismo, disminuye la cantidad de calorías que gasta.
2 Come varias veces al día. Cada vez que hacemos la digestión gastamos muchas calorías. El intestino es muy largo, necesita activar al páncreas, vesícula, hígado, estómago cada vez que digiere comida. Si hacemos la digestión seis veces, vamos a gastar más calorías que si la hacemos tres o cuatro. Las ingestas deben ser bajas en grasas, ricas en proteínas y fibra.
3 Nunca ingieras menos de 1200 kcal al día. Menos de 1200 kcal no son suficientes para mantener el metabolismo basal (lo que el cuerpo necesita para respirar y hacer las demás funciones vitales), y entonces disminuye el gasto de calorías.
4 Haz algo de ejercicio entretenido todos los días. Una pequeña caminata, nadar, hacer ejercicio en la pileta, bailar, o simplemente jugar en forma activa con los niños. Siempre busca la forma de aumentar tu movimiento cotidiano. Por ejemplo, estacioná el auto a dos o tres cuadras de donde tienes que ir; usa las escaleras, aunque sea dos pisos y, luego, el ascensor; sacá a pasear al perro al menos 5 min más de lo habitual.
5 Evita el alcohol. Este disminuye el metabolismo y estimula el apetito.
6 Toma mucha agua. Al menos 2 litros de líquido por día. Lleva siempre una botellita de agua y toma frecuentemente. Esto es milagroso: estimula el metabolismo en ¡60 cal por día!
7 Animate a tomar té verde. Es una infusión que también ayuda a gastar calorías. Si tomamos cuatro tazas de té verde por día (sin azúcar) vamos a gastar ¡60 cal extra!.
Recuerda:
Nada de trigo.
Nada de soja.
Nada de lácteos.
Nada de maíz.
Nada de azúcar.
Nada de cafeína.
Nada de alcohol.
Nada de frutas secas.
Nada de jugo de frutas.
Nada de edulcorantes sintéticos.
Un plan efectivo
Nuestra propuesta es completar un ciclo con tres distintas fases durante cuatro semanas con esta dieta del metabolismo acelerado.
FASE 1
Objetivo: calmar el estrés y calmar las glándulas suprarrenales.
Alimentación: lunes y martes, muchos carbohidratos y frutas.
Actividad física: haz ejercicio cardiovascular vigoroso, como correr, usar una máquina escaladora elíptica, o tomar clases aeróbicas.
FASE 2
Objetivo: desbloquear las reservas de grasa y generar músculo.
Alimentación: miércoles y jueves, muchas proteínas y verduras.
Actividad física: haz ejercicios de fuerza, levantando mucho peso y haciendo pocas repeticiones.
FASE 3
Objetivo: desatar la combustión hormonal, hormonas, corazón y calor.
Alimentación: viernes a domingo, todo lo anterior, más grasas saludables y aceites.
Actividad física: haz ejercicios suaves como yoga, respiración profunda con caminata suave, o disfrutar de un masaje.
* Reg. Prof. n.º 76
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