Urgen instalar una báscula en la ruta que une Pilar con San Ignacio

La Ruta IV “General Díaz” necesita la urgente instalación de una báscula de control de peso para evitar el rápido deterioro del asfalto. Actualmente, la vía está en pleno trabajo de reconstrucción y mantenimiento por parte de la empresa T&C. Sin embargo, estas obras serían absurdas si no se verifica la circulación de camiones de gran porte.

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PILAR (Clide Noemí Martínez, corresponsal). Los actuales trabajos de reconstrucción y mantenimiento en la Ruta IV “General Díaz” realizados por parte de la empresa T&C sufrirán un rápido deterioro si no existe un riguroso control de peso para los vehículos.

La vía une esta capital departamental con la ciudad de San Ignacio, Misiones.

El responsable de la firma T&C, Francisco Griñó, dijo que en varias oportunidades solicitó el apoyo de la Policía Caminera para la habilitación de una báscula en las cercanías de San Ignacio.

Explicó que este pedido fue también extendido a las autoridades del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC). Sin embargo, no recibió ninguna respuesta positiva.

Expresó que con la instalación del puesto de control evitarán la circulación de camiones con cargas que superan el peso máximo tolerado para la capa asfáltica.

Griñó abogó por la presencia de un personal de la Patrulla Caminera en la zona de obras porque, además de descargar los camiones con sobrepeso, se debe sancionar a los conductores infractores.

Indicó que la ciudadanía sería la más perjudicada si continúa el paso de camiones de triple eje con 50 toneladas de carga, cuando el límite permitido es solo de 27 toneladas.

Manifestó que los camiones que trasladan piedras hacia el Ñeembucú y arroz hacia San Ignacio son los que con mayor frecuencia superan el peso permitido.

Aseguró que la empresa está ejecutando una obra de calidad, pero dijo que la durabilidad depende de los cuidados necesarios.

Por otro lado, Francisco Griñó explicó que la Ruta IV será reconstruida en una extensión de 80 kilómetros. Dijo que el proyecto inicial era de apenas 41 kilómetros.

Indicó que tras los cambios solicitaron al MOPC el aumento del presupuesto inicial en un 12%. Sin embargo, la cartera estatal decidió modificar el monto y la contratista debió reducir algunas actividades para ejecutar las obras.

El responsable manifestó también su preocupación porque personas inescrupulosas arrojan basura al costado de la ruta, lo que obstruye el correcto drenaje de las aguas.

Recomendó que, debido a la gran cantidad de hombres y maquinaria que realizan trabajos sobre la vía, es necesario que los automovilistas circulen con precaución para evitar accidentes.

Según los datos, la constructora T&C se encargará durante los próximos siete años del mantenimiento de los 134,5 kilómetros de la vía Pilar-San Ignacio como también la reconstrucción de una importante extensión de la ruta.

La inversión es de G. 291.995 millones. Con T&C se implementa el Contrato de Rehabilitación y Mantenimiento por Índices de Servicios (Crema), financiado con bonos soberanos del Estado paraguayo.

Obra avanzó unos 9 km

Las obras en la Ruta IV avanzaron unos 9 kilómetros en la zona cercana de San Ignacio, según Francisco Griñó. Indicó que unas 150 máquinas y 278 hombres trabajan actualmente en las obras. Dijo que los trabajos más complejos iniciarán a fines de marzo, en que la empresa contratará a 450 personas. Mientras unas 250 máquinas operarán en la ruta. Agregó que las tareas cobrarán celeridad si mejoran las condiciones climáticas.

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