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LA COLMENA, departamento de Paraguarí (Aldo Lezcano, corresponsal). El productor Koichi Miyamoto, propietario de una finca en esta localidad, dijo que a mediados de octubre comenzará la recolección de pelones y después el durazno tardío.
Esta última se prolongaría hasta la primera semana de noviembre, de acuerdo a las estimaciones, para luego dar espacio a la recolección de las ciruelas.
En el caso específico de la finca Miyamoto, comentó el productor que en diciembre cosecharán los frutos de unas 250 plantas de manzano y unas 7 hectáreas de uva de distintas variedades.
“Esta vez vamos a tener abundancia de frutas para el clericó”, dijo Koichi al comentar que el año pasado hubo pérdidas como consecuencia de las heladas registradas en el invierno.
Comentó que en la zona también cultivan la mejor variedad de sandías y abundantes melones, “muy dulces y sanos”, según Koichi, quien además estimó que las ganancias serán más importantes con relación a años anteriores.
Una planta de durazno de 5 a 6 años produce dos cajones de 10 kilogramos de la fruta. Cada cajón cuesta entre G. 50.000 y G. 60.000, explicó.
Refirió que los interesados pueden adquirir las frutas en el mercado Abasto Norte de Limpio; en el abasto municipal de Asunción, en los locales de la Cooperativa La Colmena Ltda. o en los supermercados del departamento Central.
La Colmena está ubicada en el departamento de Paraguarí, distante a unos 130 kilómetros de la capital, Asunción.
El cultivo y la producción frutihortícola es herencia de los japoneses pioneros que se instalaron en la zona en 1936.
Unas 30 familias asociadas a la Cooperativa La Colmena Ltda., y otras descendientes de japoneses y paraguayos, en forma independiente se dedican también a la producción, incursionando además en otros rubros.