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SANTA MARÍA DE FE, Misiones (Rafael Marcial Montiel, corresponsal). Esta comunidad, distante 242 kilómetros al sur de Asunción, aún mantiene su casco histórico alrededor de la plaza central, un espacio amplio y con espesa arbolada, en el cual migraron de la selva los monos aulladores o carayás.
También cuenta con el museo diocesano, Cristocentro (obras barrocas centradas en Cristo Jesús), en el cual se exhiben imágenes tallados en maderas y pintadas por los indígenas con sabias naturales durante las Reducciones Jesuíticas. Además, el templo parroquial conserva obras barrocas, entre ellas la imagen de Santa María de Fe, y algunos ángeles que adornan el interior del templo.
En una de las compañías cercanas, Cerro Costa, se encuentra el cerro de 400 metros, donde fue instalada la cruz original de los jesuitas.
Santa María fue fundada en 1647, en tierras de Caaguazú, con el nombre de Nuestra Señora del Taré, por el padre jesuita Emmanuel Berthod (SJ). El sacerdote realizó las obras barrocas con los pobladores nativos, aborígenes.
La población perseguida por los paulistas bandeirantes se trasladó en el lugar actual, en 1669. Para llegar a la localidad hay que entrar en el cruce Santa María situada sobre la Ruta I “Mariscal Francisco Solano López”, en el kilómetro 230. El ramal asfaltado que conduce a la ciudad tiene 12 kilómetros.
Reclusión
El dictador Gaspar Rodríguez de Francia, en 1821, ordenó el confinamiento del sabio francés Aimé Bonpland, un médico y botánico naturalista que dedicó su vida al estudio de las plantas medicinales de la región. También ejerció la medicina en Santa María.
En 1817, el sabio Aimé Bonpland llegó a Buenos Aires. De la capital argentina se trasladó a Corrientes y cruzó la frontera hasta llegar a Santa María de Fe, Paraguay, donde fue detenido y confinado por el dictador hasta 1831.
Los historiadores relatan que Bonpland fue confinado por cruzar la frontera sin la autorización del doctor Francia. Tras recuperar su libertad Bonpland regresó a la Argentina aunque volvió de nuevo a Santa María para proseguir sus investigaciones de botánica. Murió en Santa Ana, Corrientes, el 11 de mayo de 1858.
Existen varias hipótesis sobre el confinamiento del francés. La primera era que tenía el propósito de fundar un jardín botánico en Buenos Aires, pero que no le permitieron por las circunstancias políticas en la Argentina. Entonces, Bonpland decidió viajar a Paraguay e incursionó en las Misiones, sin la autorización del dictador Francia. La otra teoría es que fundó una colonia agrícola en Corrientes (Argentina) y desde ahí incursionó a Misiones, Paraguay, con fines investigativos.