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CARAPEGUÁ (Emilce Ramírez, de nuestra redacción regional). Una de las especies avícolas más prósperas en la explotación comercial es el codorniz, debido a su precocidad, ya que estas aves alcanzan su madurez sexual en un corto tiempo.
El huevo es recomendado para el consumo humano por su nutrición, por su bajo contenido de colesterol y alto nivel en proteínas, entre otros.
Para que sea rentable este rubro, es imprescindible colocar en forma continua tanto la carne como el huevo, ya que las hembras ponen unos dos huevos diarios.
El joven productor Aldo Mareco dijo que optó por trabajar en este ramo porque es una especie de ave no muy común en esta zona del país y porque esta actividad requiere invertir poco capital para obtener buenas ganancias en un tiempo relativamente corto, unos 45 días.
Para ampliar su negocio, adquirió una incubadora en la que no solo cría codorniz, sino también pollitos.
Inversión
Según el joven productor, se necesitan aproximadamente G. 1.800.000 para la compra de una incubadora pequeña, cerca de un millón para la construcción de galpón y otros 1 millón para la jaula, comedero y bebedero, instalación eléctrica y compra de balanceado.
Los machos ya están listos a los 35 o 42 días de nacidos y las hembras comienzan a poner huevos a los 40 días de haber nacido.
Ante la rápida producción a través de la incubadora se precisa de un mayor mercado, y es por ese inconveniente que a veces debe reducir la cría de las hembras, refirió el joven.
Explicó que la carne de codorniz de la hembra se puede consumir a los 40 días y la de los machos en 60 días. El huevo en caja de 24 unidades se comercializa a G. 10.000.