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ENCARNACIÓN (De nuestra redacción regional). Antes de la marcha ciudadana en cuestión, se realizó la recolección de unas 2.500 firmas mediante una gestión que llevó un par de meses y que fue ejecutada por unos 30 voluntarios de distintos sectores y organizaciones de Encarnación.
Más de 80 manifestantes se reunieron en la mañana del martes último en la Plaza de Armas, desde donde se dirigieron caminando por la calles Carlos Antonio López hasta el local de la Municipalidad de Encarnación.
“Exigimos transportes urbanos seguros, baratos y cómodos. Los ciudadanos que vivimos en los barrios también queremos participar de los acontecimientos sociales y culturales que se desarrollan en el centro de la ciudad. También queremos disfrutar de actividades lúdicas, de las playas, pero no podemos porque no contamos con un servicio de transporte seguro y eficaz”, sostuvo Lizandra Rolón, vocera del grupo que organizó la marcha.
Manifestó además que reclaman a las autoridades municipales el cumplimiento de la Ordenanza N° 209/2006, que regula los horarios, el itinerario y las frecuencias de los colectivos.
Alegan también la Ordenanza N° 213/2013, que exige la instalación de GPS en las unidades de transporte, para controlar el cumplimiento de los itinerarios.
“Ambas normativas están vigentes, pero no son cumplidas”, dijo Rolón.
Llegar a tiempo
La activista reivindicó el derecho que tienen los ciudadanos de llegar a tiempo a sus lugares de trabajo, a sus lugares de estudio, y de llegar limpios y no cubiertos de polvo porque los asientos de los colectivos están sucios o porque el polvo del camino se cuela por aberturas que hay en el piso de los ómnibus y las ventanas.
“Quienes vivimos en los barrios alejados del centro sabemos lo que es el aislamiento y la imposibilidad de participar de actividades que se desarrollan en horas de la noche o días feriados en la ciudad, porque a determinadas horas y ciertos días de la semana directamente no contamos con el servicio”, reclamó la mujer.
La precariedad del servicio fue el otro reclamo de los manifestantes. Los colectivos en pésimo estado, con la chapería corroída, muchos vidrios rotos y hasta con las cubiertas muy gastadas circulan con total libertad por las calles encarnacenas sin que las autoridades municipales ejecuten controles a los rodados.
“Utilizar los colectivos (...) se convierte en un verdadero peligro, porque tienen vidrios astillables y la carrocería está toda rota”, amén de que no respetan ni sus frecuencias, dijo Rolón.
Tras reclamar por varios minutos la presencia del intendente, Joel Maidana (ANR), a quien personalmente querían entregar la nota con las más de 2.500 firmas, se presentó a la explanada del edificio comunal el presidente de la Junta Municipal, Eduardo Florentín (ANR), quien prometió canalizar la inquietud.
“Estaremos buscando solución a los reclamos de la ciudadanía. Vamos a canalizar el pedido”, dijo el edil.
La organización de vecinos contó con el apoyo de organizaciones sociales, como el Sindicato de Trabajadoras Domésticas de Itapúa, la Federación de Afectados por la represa de Yacyretá de Itapúa y Misiones (Fedayin), el Sindicato de Trabajadores de la ANDE (Sitrande), y vecinos de diferentes barrios de Encarnación.