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Pilar, departamento de Ñeembucú (Rafal Marcial Montiel, corresponsal). Adoquines levantados, deterioros y baches a raíz de las copiosas y prolongadas lluvias experimentan distintas arterias de esta ciudad.
Los pobladores piden la urgente reparación de las vías a la Municipalidad, en especial la de Capitán Caballero y Pedro Melo de Portugal, situada cerca de la costanera.
Estas vías están muy deterioradas lo que pone en peligro a los automovilistas e, incluso, a peatones.
Los vecinos señalaron que presentaron el pedido, pero que hasta el momento no hay respuestas.
La calle Melo de Portugal tiene un gran bache que dificulta el paso de los automovilistas y motociclistas.
Pobladores del barrio que viven cerca del muro de la costanera manifestaron su preocupación también a los miembros de la Junta Municipal y esperan obtener respuesta favorable.
La capital departamental cuenta con un muro de contención hacia el río Paraguay, pero algunos sectores de los barrios ribereños no tienen suficiente protección, por lo que las aguas ingresaron a sus viviendas y arrasaron con las calles.
Prioridad
El intendente Luis Benítez (ANR) señaló que a raíz de la crecida están priorizando la asistencia a los damnificados, que son unas 150 personas en la ciudad de Pilar y 700 familias en las compañías vecinas.
“Somos consciente de que tenemos que reparar las calles erosionadas, pero priorizamos la ayuda a los damnificados, por la difícil situación que atraviesan las familias ribereñas. Merecen nuestra atención y están sufriendo por las inundaciones”, remarcó.
Añadió que la Municipalidad descuida ciertamente dos aspectos, que son la limpieza y la reparación de las calles, debido justamente a la emergencia generada por la crecida del río.
Prometió que una vez superado el drama de las inundaciones centrarán su atención en la limpieza y en el mejoramiento de las vías dañadas por las torrenciales lluvias de esta época.