Rúcula

Apreciada desde tiempos remotos por su alto contenido en fibras; vitaminas A, B y C, hierro, magnesio y potasio. Originaria del sur de Europa y Asia, posee propiedades desintoxicantes y estimulantes. Es un excelente antianémico.

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Sus hojas, de sabor picante y ligeramente amargo, se consumen crudas en ensaladas, sola o con lechuga y achicoria, o bien, cocidas o como decoración de platos. Combina muy bien con la papa, las pastas y la pizza.

Pertenece a la familia de las crucíferas. Alcanza una altura de unos 25 cm o más, pero sus hojas, de unos 10 cm de largo, se consumen preferentemente tiernas.

Es una planta anual, erecta, en forma de roseta de hojas.

Florece en primavera. Emite un tallo floral que alcanza alrededor de los 90 cm de altura. Sus flores son blancas, dispuestas en racimos, y sus frutos silicuas alargadas.

Posee un mejor desarrollo en climas frescos. El calor del sol provoca una floración temprana y amarga en sus hojas, por ello, es conveniente sembrarla a la sombra o asociada con otras plantas que puedan protegerla de los rayos solares directos, como el tomate o la berenjena.

No es exigente en cuanto a suelo se refiere, adaptándose a todo tipo de terreno.

Se reproduce por semilla, ya sea en siembra directa o en semillero, dejando una distancia de 20 a 40 cm entre hileras y 5 a 10 cm entre plantas. La profundidad de siembra no debe exceder los 1 cm.

No requiere muchos cuidados, aparte del riego regular que debe incrementarse cerca de la cosecha para que las hojas sean más tiernas, y la limpieza propia de cualquier cultivo.

La cosecha se realiza cortando las hojas laterales al ras del suelo y dejando las del centro para que rebroten, o bien, sacando la planta completa. No debe permitirse que las hojas superen los 10 cm si queremos que sean tiernas y no demasiado amargas. Se pueden realizar 4 a 5 cortes con intervalos de 10 a 20 días.

Una vez cosechadas, las hojas deben consumirse preferentemente frescas, de lo contrario, pueden conservarse por algunos días en la heladera. Se marchitan fácilmente.

Entre las enfermedades más comunes están el oídio (hongo pequeño parásito de las hojas), la roya y los pulgones.

Fuente

LERENA GABARRET, A. (1980). Enciclopedia de la Huerta. 7.a ed. BuenosAires: Editorial Mundo Técnico SRL.

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