¿Recordamos a las personas de edad?

Encaminar a los niños a valorar a las personas de edad también es una tarea dentro del quehacer educativo. Recordemos que son varias las etapas evolutivas del ser humano, cada una tiene sus peculiaridades a las que progresivamente nos habituamos.

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¡A trabajar!

- Ponemos atención a las orientaciones emanadas del docente.

- Organizamos creativamente la sala de clases.

- Nos disponemos a mirar alguna película o documental, referente a la realidad de las personas de edad en el país.

- Emitimos opiniones y damos ejemplos de vivencias trascendentes.

- Concluimos apreciando tan relevante etapa humana.

- Socializamos ampliamente (institucional, barrial, distrital, departamental).

Cómo convivir mejor con personas mayores

Dr. Claudio García Pintos

Alguien dijo alguna vez que quien no descubre el sentido de una edad (cualquiera de ellas) se ve condenado a vivir lo peor de esa edad, a sufrirla. Vale para todas las edades, no sólo la vejez. ¿Estamos dispuestos a descubrirlo? ¿Colaboramos con los viejos para que lo descubran? Esa es una responsabilidad de todos. Aquí, algunos consejos para tener en cuenta al momento de encarar la convivencia con personas mayores.

Intimidad. Las personas mayores tienen pudor. Como cualquiera de nosotros. Respetar su intimidad es respetarlos como personas.

Cultura. Las personas mayores tienen hábitos idiosincrásicos, culturales, que le significan identidad. Debemos respetar sus costumbres como por ejemplo, ir a misa, escuchar tal tipo de música, gustar de su programa de televisión, tener estampitas en su mesa de luz, otros. No respetar su cultura personal es una forma de violencia y maltrato.

Pertenencia. Todo ser humano necesita sentirse «con alguien», necesita «pertenecer». El abandono no es «donde vive el anciano» sino una actitud respecto de él. Cuando no lo hacemos partícipe de la vida familiar, lo estamos abandonando. Es una forma de maltrato.

Escucha. Las personas mayores tienen muchas cosas para dar. Experiencia acreditada en tantos años de vida. Historias que dan testimonio de la vida familiar, la tradición. Necesitan transmitirlo y la familia necesita recibirlo.

Comprender, no entender. Los vínculos se sostienen por la comprensión, no por el entendimiento. Podemos no entenderlos, pero no podemos dejar de comprender sus emociones, sus sentimientos y sus necesidades.

Actividades.

1. Con revistas y diarios preparamos collages, referentes al tema desarrollado. Exponemos en el rincón de Estudios Sociales.

2. Llevamos elementos de higiene a las personas de edad internadas en hospitales, centros o puestos de salud, albergues de ancianos.

3. Visitamos a nuestros abuelos entregándoles frutas frescas.

Fuente

Recuperado de: http://entremujeres.clarin.com/hogar-y-familia/tercera-edad/abuelos-tercera_edad-gerontologia_0_257374262.html

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