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Los parásitos son un grupo de animales que viven a expensas de otros seres vivos, en cuyo aparato digestivo se alojan y con el que compite por el consumo de las sustancias alimenticias que ingiere el huésped. Su tamaño va desde ser diminuto (y sólo es posible verlos a través del microscopio), o medir desde centímetros hasta metros. Su presencia en el organismo humano está directamente relacionada con la falta de higiene, tanto personal como al preparar alimentos y las condiciones del lugar donde se consumen.
Causas frecuentes
* Consumo de agua y alimentos contaminados con materia fecal infestada de huevecillos o quistes de parásitos.
* No lavarse las manos antes de comer ni después de ir al baño.
* Comer carne de cerdo mal cocida.
* Caminar descalzo.
* Los niños suelen llevar todo tipo de objetos a la boca, y ocasionalmente comen tierra.
Síntomas
Los síntomas dependen del parásito causante. Ante estas manifestaciones que detallamos a continuación, lo correcto es acudir al médico para que determine el tipo de parásito y el tratamiento a seguir.
Síntomas: debilidad, dolor de cabeza, cólicos abdominales y diarrea con moco y sangre, fuerte dolor abdominal, secreción de baba por las noches, rechinido de dientes, inflamación de estómago, comezón corporal y evacuaciones líquidas con lombrices. Otros síntomas pueden ser: diarrea amarilla, espumosa y de muy mal olor, además, hay vómito, intenso dolor de estómago, flatulencia e inflamación abdominal, palidez, falta de apetito, anemia, tos seca, cambios de conducta, insomnio, comezón en ano.
Prevención
* No consumir agua ni alimentos contaminados; debe evitarse comer aquellos que se preparan al aire libre.
* Hervir o clorar el agua, o bien, preferir la embotellada.
* Lavar y desinfectar frutas y verduras.
* Cocer o freír bien los alimentos, especialmente la carne de cerdo.
* Preparar los alimentos sobre superficies limpias.
* Lavarse las manos antes de comer y preparar alimentos y después de ir al baño o cambiar el pañal a un bebé. Las uñas deben asearse minuciosamente.
* Cuando una persona tiene infección por parásitos nunca debe preparar ni servir alimentos.
* No caminar descalzo.
* Vigilar que los niños no coman tierra.
* Mantener el sanitario limpio y desinfectado.
Causas frecuentes
* Consumo de agua y alimentos contaminados con materia fecal infestada de huevecillos o quistes de parásitos.
* No lavarse las manos antes de comer ni después de ir al baño.
* Comer carne de cerdo mal cocida.
* Caminar descalzo.
* Los niños suelen llevar todo tipo de objetos a la boca, y ocasionalmente comen tierra.
Síntomas
Los síntomas dependen del parásito causante. Ante estas manifestaciones que detallamos a continuación, lo correcto es acudir al médico para que determine el tipo de parásito y el tratamiento a seguir.
Síntomas: debilidad, dolor de cabeza, cólicos abdominales y diarrea con moco y sangre, fuerte dolor abdominal, secreción de baba por las noches, rechinido de dientes, inflamación de estómago, comezón corporal y evacuaciones líquidas con lombrices. Otros síntomas pueden ser: diarrea amarilla, espumosa y de muy mal olor, además, hay vómito, intenso dolor de estómago, flatulencia e inflamación abdominal, palidez, falta de apetito, anemia, tos seca, cambios de conducta, insomnio, comezón en ano.
Prevención
* No consumir agua ni alimentos contaminados; debe evitarse comer aquellos que se preparan al aire libre.
* Hervir o clorar el agua, o bien, preferir la embotellada.
* Lavar y desinfectar frutas y verduras.
* Cocer o freír bien los alimentos, especialmente la carne de cerdo.
* Preparar los alimentos sobre superficies limpias.
* Lavarse las manos antes de comer y preparar alimentos y después de ir al baño o cambiar el pañal a un bebé. Las uñas deben asearse minuciosamente.
* Cuando una persona tiene infección por parásitos nunca debe preparar ni servir alimentos.
* No caminar descalzo.
* Vigilar que los niños no coman tierra.
* Mantener el sanitario limpio y desinfectado.