La flexibilidad

En esta edición, conoceremos acerca de una cualidad física muy importante para la salud y la práctica de toda actividad deportiva y recreativa.

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La flexibilidad se define como la capacidad que tienen los músculos para estirarse cuando una articulación se mueve.

Es específica para cada articulación y varía considerablemente con la edad, sexo y el grado de entrenamiento. Es mayor durante las primeras etapas de la vida, en las mujeres y personas entrenadas.

Claves para mantenerse flexible

• Realizar estiramientos específicos localizados en cada parte del cuerpo.

• Practicar un mínimo de dos a tres veces por semana.

• Ejecutarlos sin prisas, ya que los movimientos rápidos son potencialmente perjudiciales y pueden producir tirones musculares o calambres.

• Incorporarlos a las fases de calentamiento o enfriamiento de las sesiones de ejercicio.

Beneficios de los ejercicios de flexibilidad

• Previene lesiones.

• Relaja los músculos rígidos y tensos.

• Mejora las técnicas de algunas actividades deportivas.

Secuencia básica

Para realizar los ejercicios de flexibilidad, se debe seguir la siguiente secuencia:

a. Relajarse.

b. Alcanzar la posición de máxima tensión sin dolor y aguantar durante 20 a 30 s.

c. Relajarse.

Rutina de ejercicios

• Girar la cabeza hacia un lado, presionando levemente con una mano y luego al otro lado

• Mover la cabeza hacia abajo y luego hacia arriba.

• Cruzar el brazo delante del pecho y tirar suavemente con la mano contraria, luego con el otro brazo.

• Pararse sobre una sola pierna, levantar el otro pie y sujetarlo por detrás con la rodilla flexionada, tirando suavemente con la mano del mismo lado. Repetir con la otra pierna. Si se dificulta el equilibrio, se puede sujetar en la pared o en una silla con la otra mano.

• Ponerse de pie a 45-60 cm de frente a una pared, con un pie delante del otro. Colocar las dos manos contra la pared y apoyar su peso contra la pared hasta que note tensión en la parte posterior de la pierna trasera. Repetir con la otra pierna.

• Acostarse sobre la espalda con las piernas extendidas. Levantar una pierna con la rodilla flexionada y tirar de ella con las manos hacia el pecho. Repetir con la otra pierna.

Fuente. Recuperado de: www.saludalia.com/vivir-sano/flexibilidad

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