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En este tramo que queda de la agenda escolar es necesario que los docentes,luego de la evaluación de la primera etapa, orienten sus acciones pedagógicas para revertir resultados negativos, de tal forma a encauzar a aquellos alumnos que no están logrando las capacidades y competencias, sin descuidar el avance del desarrollo programático.
La planificación es imprescindible para esta etapa, ya que esto ayudará a un mejor desarrollo de las materias en cada curso y se podrán asegurar aprendizajes relevantes y pertinentes. Por lo tanto, el tiempo que queda debe ser aprovechado al máximo de manera a que los niños y adolescentes puedan optimizar sus aprendizajes especialmente en las competencias básicas y, en este proceso, es de vital importancia el acompañamiento de los padres, maestros y directivos.
Esta etapa es decisiva para desarrollar los contenidos faltantes, reforzar los temas en los que presenten mayor dificultad los alumnos, completar las lecciones y entregar los trabajos pendientes. Ya no es momento de andar dando vueltas distrayéndose en temas secundarios y sin importancia. Es hora de tomar las riendas y medidas necesarias para obtener un rendimiento beneficioso, que demuestre la eficacia y eficiencia del trabajo concretado durante el transcurso del periodo lectivo.
Un buen resultado no solo se basa en que el alumno consiga una libreta con altas calificaciones, con temarios cortos y respuestas memorísticas en los exámenes. Los aprendizajes duraderos se obtienen cuando los maestros logran que los estudiantes internalicen lo estudiado y que sus conocimientos no solo les dure hasta el final de la prueba, sino que los implementen en los siguientes años según los grados que vayan avanzando, y que sean válidos en la vida cotidiana para mejorar su calidad de vida y la de su entorno.
El compromiso con la educación debe ser de la comunidad entera, teniendo en cuenta que si mejoramos en este aspecto vamos a dar un gran paso en la construcción de un Paraguay más honesto y el desarrollo de una mejor sociedad con ciudadanos capaces y preparados para enfrentar los desafíos de un mundo cada vez más complejo y cambiante.