Cargando...
Para el desarrollo de una dependencia, adicción o trastorno por consumo, se requieren muchos factores como: el tipo de droga o sustancia, ambiente, individuo y todo lo que se mencionó en entregas anteriores. Sin embargo, hay ciertas características comunes que pueden ayudar a sospechar la presencia de un posible trastorno.
Como ya conocemos, una persona no toma la decisión de volverse dependiente de la sustancia inmediatamente. Esto sucede de forma lenta y gradual. Inicia con el consumo eventual o experimental, a partir del cual siente el efecto de la sustancia. Esto se conoce como intoxicación y desde ese momento, el consumo puede ir aumentando tanto en cantidad como en frecuencia. De esta manera, va cambiando el patrón de consumo a una modalidad denominada abuso.
La dependencia se caracteriza por el hecho de que la persona pasa la mayor parte del día en actividades dirigidas como pensar en la sustancia, buscarla, consumirla (sola o en grupo). Se observa que a medida que el consumo se mantiene en el tiempo, el individuo «aguanta» dosis más altas de la droga. Esto quiere decir que si antes lograba los efectos con una lata de cerveza o un cigarrillo de marihuana, ahora requiere dos o tres; esto se llama tolerancia. También se observa que el consumidor siente molestias físicas o psíquicas cuando disminuye la cantidad o debe suspender el consumo. Los trastornos pueden incluir desde mal humor hasta convulsiones, en algunos casos. Este efecto lleva el nombre de abstinencia.
El consumo acarrea otros problemas en el ambiente en el que se desenvuelve la persona, por ejemplo, puede tener problemas en el trabajo o colegio como: ausencias injustificadas, olvido de tareas importantes y disminución en el rendimiento general. También pueden observarse problemas en el relacionamiento con los demás o cambios de grupos de amigos y aislamiento. Se observa deterioro en el relacionamiento familiar; y si hablamos de jóvenes, se puede observar huida de la casa, problemas de conducta graves, entre otros. En todos los casos pueden existir problemas relacionados a accidentes domésticos o de tránsito, y exposición a violencia en todas sus manifestaciones.
A pesar de todo esto, la persona que consume no desea dejar de consumir y continúa en las mismas actividades, incluso cuando se presenta un problema de salud grave, el riesgo de perder el trabajo o una separación inminente en su contexto familiar.
A esto se agrega el riesgo que presenta el consumo de drogas para la adquisición de enfermedades de transmisión sexual, y otros tipos como el cáncer y las enfermedades del hígado o pulmonares. También los embarazos no planificados.
Actividades
1. Responde.
¿Cuáles son los criterios para sospechar que una persona tiene un trastorno por consumo o dependencia de drogas?
2. Define.
a. Tolerancia
b. Abstinencia
c. Intoxicación
Fuentes: KAPLAN, Sadock. (2015). Sinopsis de Psiquiatría. Philadelphia, USA: Wolters Kluwer Programa Integral de Desarrollo Educativo. Prevención en las Instituciones Educativas. Asunción, Paraguay: Prever.