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Utilizada generalmente como forraje para animales, la alfalfa es considerada desde hace unos años como un elemento importante dentro de la dieta humana.
Algunos estudiosos indican que es un buen antihemorrágico (vitamina K), antianémico (sales de hierro orgánico de fácil digestión), estrogénico (fitoestrógenos como isoflavonas y cumestrol), estimulante del apetito, ayuda a la digestión, reduce el colesterol, remineraliza (calcio, fósforo, magnesio, selenio, cinc, manganeso, sílice, potasio), proteinizante (contiene todos los aminoácidos esenciales y algunos no esenciales), antiartrítico y antiulceroso.
Existen dos especies botánicas y sus híbridos
. Medicago sativa L. Se caracteriza por tener raíces profundas y estar bien adaptada al calor.
. Medicago falcata L. Es poco exigente a los nutrientes y más resistente al frío.
. Varia. Formada por híbridos.
En la granja es especialmente interesante proporcionárselo a las hembras preñadas y en periodo de lactación, debido al alto contenido de fibras y nutrientes. Podemos dárselo fresco o bien seco (heno).
Cultivo
Necesita suelos profundos, bien drenados y aireados, ricos en minerales. Por lo que es bueno realizar un laboreo profundo usando la laya y proporcionando abonos.
Es capaz de fijar el nitrógeno atmosférico a la tierra, pero las plántulas no tienen suficientes bacterias por lo que el abonado inicial debe ser rico en nitrógeno, para que las plantas tengan suficiente hasta que las bacterias que se asocian a sus raíces empiecen a producir el propio. Luego se hará un abonado una vez al año.
Puede sembrarse al voleo o en surcos distanciados 20 a 30 cm, con 1 a 2 cm de profundidad.
Los mejores cultivos precedentes son hortalizas no leguminosas, cereales y maíz. Se debe evitar sembrar cerca de o donde hubo remolacha o zanahoria para evitar enfermedades.
El cultivo puede permanecer en el terreno de 2 a 10 años, dependiendo del tipo de explotación. Para volver a sembrarlo en el mismo lugar, hay que esperar un periodo aproximado de 4 a 5 años.
La enfermedad que más perjuicio ocasiona es el mal vinoso, producido por la Rhyzoctonia violácea, que destruye el sistema. El riego debe ser corto y frecuente en el periodo de germinación y hasta que las plantas adquieran una cierta fortaleza. Debe evitarse el encharcamiento y la formación de costras.
Fuentes
Lerena Gabarret, A. (1980) Enciclopedia de la Huerta. (Séptima Edición). Buenos Aires: Editorial Mundo Técnico S.R.L.
Recuperado de
http://www.bvs.sld.cu/revistas/san/vol7_4_03/san01403.pdf